Cake Minuesa entrevista a Juan Carlos. Se trata de un español que tras haber trabajado 26 años tiene serias dificultades para llegar a fin de mes. Él sufre un cáncer que le impide reincorporarse a la vida laboral y su pareja, una discapacidad del 45%. Juan Carlos cobra una ayuda de 715 euros de los que destina 375 euros a pagar el alquiler.»Sin la ayuda de la familia, no podríamos sobrevivir». Su caso contrasta con el de los marroquíes que vive a escasos 500 metros de su casa. «Somos siete y tenemos una casa de cuatro habitaciones por la que pagamos unos 50 euros». Un claro ejemplo de la doble vara de medir de las ayudas sociales en España.
