La supuesta asesina del pequeño Gabriel no estaba de acuerdo con la relación que mantenía su pareja con su exmujer.
Volver a la República Dominicana era uno de los grandes anhelos de Ana Julia Quezada. Según OKDIARIO, la detenida por el asesinato de Gabriel Cruz, de 8 años, había comentado a sus allegados su deseo de regresar a su país de origen y los problemas que ponía Ángel, su pareja y padre del pequeño, para realizar el viaje al no querer separarse de su hijo.
La investigación se centra ahora en investigar el móvil del crimen. Los agentes de la Guardia Civil conocen la mala relación del pequeño con Ana Julia, pues la tensión entre ambos era evidente y ésta consideraba al pequeño «un obstáculo» para sus planes de futuro con Ángel.
Ana Julia Quezada, de 44 años, llegó en 1995 a Burgos procedente de su país natal, la República Dominicana, y se instaló junto a sus dos hijas de dos y cuatro años -que tuvo en su país fruto de una relación anterior- en un piso de esta ciudad.
La hija de 4 años falleció en 1996 al caer desde una ventana de la vivienda en Burgos a un patio interior, un caso que se cerró como una muerte accidental, por lo que la Policía Nacional está realizando gestiones con el Juzgado que investigó esta muerte, para decidir si reabre este caso, según fuentes de la investigación.
Por el momento, los agentes están recabando la mayor información posible sobre esta muerte ocurrida el 10 de marzo de 1996 y que investigó el Juzgado de Instrucción número 6 de Burgos.
La otra hija, que ahora tiene 24 años y reside en Burgos, ha sido ingresada en el Hospital Universitario de esta ciudad por una crisis de ansiedad al conocer la detención de su progenitora por la muerte del niño, según fuentes de la investigación.
‘No era familiar’
Familiares de Ana Julia Quezada, de origen dominicano, expresaron hoy su sorpresa y la definieron como poco familiar. «Lo encuentro extraño, nosotros somos muy humildes, nos ganamos el pan con el sudor de la frente. No creo que ella, que viene de abajo con sacrificio y esfuerzo, le venga un pensamiento y le arranque la vida a un inocente», dijo un hermano de la detenida, Juan José Quezada.
La madre de Ana Quezada, Juana Cruz, también expresó su sorpresa y dijo que sus hijos nunca se han visto envueltos en conflictos con la ley, por lo que entiende que si es culpable fue «el demonio que la indujo a cometer el hecho», al tiempo que pidió que se haga una profunda investigación, según publicó en su página web «Listín Diario».
Juana Cruz añadió que su hija viajó a España hace 26 años y la definió como una persona descuidada y desentendida con su familia en República Dominicana, según el diario.