Más de 1.300 personas asistieron hoy en el recinto ferial de Ifeza al acto de entrega de los Premios Caja Rural de Zamora, que cumple su vigésimo aniversario. La Fundación concedió el Premio ‘Zamorano ilustre’ a Gerardo Prieto Bozano, tras 46 años y medio en el Hospital de la Paz, en la capital de España. “Toda una vida salvando cientos de vidas; muchas de ellas, niños”, indicó el director general de la Caja, Cipriano García.
El Premio ‘Zamorano del año’ recayó en la Denominación de Origen Queso Zamorano, que cumple un cuarto de siglo “luchando por situar al queso de la provincia en los niveles que merecedor su calidad y reconocimiento nacional e internacional”.
El Premio a la ‘Actividad empresarial’ recayó sobre el Centro de Transportes de Benavente, que también cumple 25 años de actividad y que desarrolla un importante papel en la activación económica local y provincial.
Por su parte, el Servicio de Extinción de Incendios de la Junta de Castilla y León fue reconocido con el Premio ‘Valores humanos’, por la labor que realiza, sobre todo en los meses veraniegos, contribuyendo a salvaguardar el medio ambiente y los núcleos de población, poniendo a menudo sus propias vidas en riesgo.
El Premio a la ‘Trayectoria deportiva’ le correspondió a Ricardo Ferrero Domingo, “un magnífico exponente de dedicación y entrega al deporte, en especial, a la pelota”
Con los cinco premios entregados hoy, la Fundación Caja Rural de Zamora ha entregado un total de 126 galardones y reconocimientos en sus dos décadas de existencia, según precisó el secretario de la Institución, Feliciano Ferrero.
El presidente de Caja Rural de Zamora, Nicanor Santos, quien incidió en el “orgullo y satisfacción” que le producía “comprobar el apoyo y reconocimiento” de tan amplia representación de la sociedad zamorana, destacó la presencia de personas invitadas procedentes de León y Valladolid, provincias en las que, junto con Ourense, la cooperativa de crédito desarrolla también una intensa actividad.
“Siempre hemos promovido los valores humanos y las personas como motor principal del proyecto de Caja Rural; y estos premios, son un claro ejemplo del reconocimiento a ciudadanos y organizaciones que nos engrandecen como pueblo”, señaló. “La Fundación Caja Rural de Zamora es hoy un importante pilar en el desarrollo y crecimiento del mundo sociocultural y de multitud de proyectos promovidos por personas y colectivos. Fruto de ese caudal y generación de iniciativas, nosotros somos y representamos hoy: una cooperativa de crédito al servicio de la sociedad”, añadió.
El presidente de la Caja cerró su intervención de bienvenida con una cita de Friedrich Nietzsche: “Solamente aquel que construye el futuro tiene derecho a juzgar el pasado”.
Nicanor Santos hizo estas declaraciones en el recinto ferial de Ifeza, ante más de 1.300 personas, representantes de todos los sectores de la sociedad zamorana, como parte del discurso que pronunció en el acto de entrega de los Premios Fundación Caja Rural de Zamora 2018.
El acto contó con la presencia del alcalde de Zamora, Francisco Guarido; la presidenta de la Diputación de Zamora, Mayte Martín; el delegado territorial de la Junta de Castilla y León, Alberto Castro; el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco; el director general de la Caja, Cipriano García; el secretario de la Fundación Caja Rural de Zamora, Feliciano Ferrero; el presidente de la Cámara de Comercio de Zamora, Enrique Oliveira; el presidente de la Asociación Zamorana de Empresarios de Hostelería, Óscar Somoza, y el presidente de CEOE-Cepyme de Zamora, José María Esbec, entre otros muchos representantes de instituciones y entidades públicas y privadas.
Cipriano García, quien hizo hincapié en que la Fundación Caja Rural de Zamora conmemora su vigésimo aniversario “engrandeciendo el esfuerzo y buen hacer de muchas personas zamoranas”, aseguró que “estos galardones “son los premios de Zamora” y apostilló: “Siempre nos hemos sentido orgullosos de nuestro origen, de ser de esta tierra, de pertenecer a un modelo de banca local donde las personas son el centro de nuestra actividad cotidiana”.
García Rodríguez definió la “humildad” como “columna vertebral” de los cinco pilares sobre los que se sustenta Caja Rural de Zamora, al igual que “lo son” las cinco personas y entidades premiadas, concretamente, “humanidad, confianza, profesionalidad, esfuerzo y cercanía”.
Para cerrar la ronda de intervenciones y tras la entrega de los premios, el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, puso de manifiesto la presencia de Caja Rural de Zamora en la mayoría de acontecimientos e iniciativas gestadas en la provincia. “No hay acontecimiento festivo, científico, cultural, solidario o deportivo con más o menos personas implicadas en nuestra ciudad o nuestro pueblos donde no aparezca el logo de Caja Rural”, afirmó.
“Forman parte de una manera cotidiana del paisaje social y pueden pasar desapercibidos”, bromeó, en relación con el hecho de haber olvidado citar recientemente el patrocinio de la Caja en la elaboración de un documental sobre el escultor Baltasar Lobo realizado por Agustín Remesal.
Guarido Viñuela agradeció el trabajo realizado por cada uno de los protagonistas y entidades reconocidas por la Fundación Caja Rural de Zamora. “Sois ejemplo de que hay que seguir trabajando para que nuestros jóvenes no tengan que emigrar a la fuerza y tengamos futuro”, señaló.