La decisión del consistorio no habría despertado tanta indignación si antes no hubiese rechazado las solicitudes de la parroquia local para hacer repicar sus campanas.

En la Europa hodierna, el islam se beneficia de una tolerancia que las autoridades civiles niegan a otras religiones (especialmente a la cristiana) que son progresivamente recluidas entre las paredes de los templos. En este sentido, cabe mencionar una reciente decisión del Ayuntamiento de la localidad sueca de Vaxjo, que ha concedido a la mezquita local un permiso para el llamado a la oración.
Tal y como recoge ‘Catholic News Agency’, la decisión del consistorio no habría despertado tanta indignación si antes no hubiese rechazado las solicitudes de la parroquia local para hacer repicar sus campanas. Así lo explica, al menos, el Padre Ingvar Fogelqvist, quien percibe una preocupante falta de equidad: ‘Es una cuestión de equidad y tras la decisión de otorgar permiso a la mezquita para hacer un llamado a la oración, hemos valorado la posibilidad de volver a presentar la solicitud’.
En este sentido, el sacerdote ha asegurado que las campanas de la iglesia local son ‘pequeñas’ y que su tañido ayudaría a dotar de mayor visibilidad en el municipio a la comunidad católica.

Suecia, un paraíso islámico

La decisión del Ayuntamiento de Vaxjo ha suscitado las reacciones de diversas personalidades políticas de Suecia, un país en el que el islam goza de cada vez mayor protagonismo. En este sentido, el primer ministro, Stefan Lofven, ha señalado que la ‘sociedad en Suecia es construida sobre la base de diferentes cultos religiosos’.
En cualquier caso, otros políticos han criticado con causticidad la determinación del consistorio. Así, Ebba Busch Thor, del partido democristiano, ha asegurado ‘no deberían estar obligados a oír la llamada al rezo islámico’.
En esta misma línea se ha pronunciado la representante de los conservadores en Vaxjo, Anna Tenje, quien se ha mostrado convencida de que el permiso concedido por el consistorio no sólo ‘no reforzará la integración’, sino que contribuirá a ‘marginar aún más a la localidad’.
Recordemos que los episodios de violencia en la multicultural Suecia se han tornado en luctuosa norma y que, fruto de la creciente influencia islámica en la sociedad, las autoridades civiles se están afanando en normalizar prácticas tan ominosas como la poligamia.