La Policía de Bolivia ha detenido este viernes al expresidente del Comité Cívico de Potosí (Comcipo), Marco Antonio Pumari, por supuestamente quemar oficinas del Tribunal Electoral del departamento durante la crisis política de 2019.
Fuentes oficiales citadas por el diario boliviano ‘La Razón’ se han hecho eco de la versión del Gobierno de Arce, que afirma que Pumari atacó las oficinas de la autoridad electoral como reclamo al fraude electoral de octubre de 2019, en el que el expresidente Evo Morales intentó reelegirse infructuosamente.
Pumari, uno de los líderes de las protestas que derivaron en la dimisión de Morales, ha sido trasladado a La Paz, donde el régimen de Arce le ha señalado por la presunta comisión de los delitos de sedición y terrorismo por su rol en las manifestaciones tras las elecciones.
La Policía de Bolivia también ha registrado este viernes las oficinas del Comcipo, por lo que su presidente, Juan Carlos Huallpa, y dirigentes como Ramiro Subia se han declarado en la «clandestinidad».
Comcipo ya denunció la existencia de una orden de detención contra su expresidente, que se presentó a la vicepresidencia de Bolivia junto al ‘excívico’ Luis Fernando Camacho –actual gobernador de Santa Cruz– en las elecciones de 2020, en agosto de este año. Durante la crisis postelectoral se quemaron las oficinas electorales departamentales de Potosí, Trinidad, Cobija y Santa Cruz.
Por su parte, el Consejo Nacional de Comités Cívicos de Bolivia ha respaldado al Comcipo y ha advertido de que no permitirá una «nueva violación al sistema democrático y a la representación legítima de la sociedad«.
En un comunicado recogido por la prensa boliviana, la agrupación de comités cívicos ha asegurado que «defenderán Bolivia todas las veces que sea necesario, amparados en la Constitución, mientras el régimen intente quebrar una vez más el sistema democrático».
Así, ha pedido al pueblo de Potosí y al boliviano, en general, «defender sus derechos y libertades, la institucionalidad y la democracia» que se les «arrebata».