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posee una amplia trayectoria en el escenario político de Colombia

Oscar Iván Zuluaga: el encargado de unificar al frente anticomunista en Colombia

El aspirante presidencial del Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga. Twitter

El exministro Oscar Iván Zuluaga enfrenta un gran reto como candidato presidencial del Centro Democrático, partido del presidente Iván Duque y cuyo máximo líder es el expresidente Álvaro Uribe, quien de hecho tiene amplios poderes estatutarios para conformar listas al congreso, dirimir conflictos entre la militancia y, en general, definir el rumbo del partido.

Esto implica que Zuluaga tendrá que lidiar con la pobre imagen del actual presidente y la dramática caída en imagen favorable de Uribe, incluso en sectores de derecha que lo acusan hoy de hacer propuestas contrarias a las tesis originales que defendió cuando fue presidente entre 2002 y 2010.

Zuluaga no parte como favorito en las encuestas de intención de voto y el mismo Uribe reconoce que la fuerza que otrora tenía “el que diga Uribe” ya no es tal. Esto implica, como lo reconoció en su primer discurso cuando se hicieron públicos los resultados de las encuestas que definieron su candidatura, que deberá buscar alianzas y consolidar un bloque que enfrente unido a la izquierda radical. En la historia política personal de Zuluaga, no sería algo nuevo.

En 1988 fue elegido concejal de su municipio natal, Pensilvania, Caldas, y dos años después, alcalde. Hizo parte del movimiento conservador que respondía al liderazgo nacional de Álvaro Gómez Hurtado y que en Caldas encabezaba Alfonso Hoyos, cuyo hijo, Luis Alfonso, ocupaba un escaño en el Senado.

De hecho, en 1994, Zuluaga integraría en segundo renglón la lista al Senado de ese movimiento, sin resultar elegido, aunque acompañando con sus votos la exitosa elección. Era una fuerza política que se oponía a la hegemonía que habían logrado consolidar los senadores Victor Renán Barco, Liberal, y Omar Yepes, Conservador, en el departamento; propio de los últimos vestigios del frente nacional entre liberales y conservadores oficialistas (1958-1974). 

Entre 1992 y 2002 asumió la Presidencia de la empresa familiar, Acerías de Colombia (ACESCO), pero tras la destitución de Luis Alfonso Hoyos como senador, en un fallo que aún hoy genera muchas dudas, asumió el liderazgo del movimiento político y fue elegido Senador, el mismo año en que Uribe ganó la presidencia en primera vuelta (2002).

Fue uno de los primeros alfiles del uribismo y logró articular las facciones liberales de los exministros Alfonso Valdivieso y Rafael Pardo Rueda, otrora uribistas, para crear el “Nuevo Partido”, en el que, por cierto, milito el hoy candidato presidencial independiente Federico Gutiérrez, quien fue elegido concejal de Medellín por ese partido en 2003.

Tres años después, apoyaría la creación del Partido Social de Unidad Nacional, más conocido como Partido de la U, con el fin de articular una sólida bancada uribista en el Congreso para el segundo periodo de Uribe. En ese esfuerzo estuvo acompañando a Juan Manuel Santos, quien primero coordinó la bancada de gobierno y después fue nombrado ministro de defensa (cargo al que renuncia para asumir la candidatura presidencial como defensor del legado de Uribe). Las paradojas de la política colombiana: Zuluaga, por su parte, sería nombrado ministro de Hacienda y reconocido como el mejor de toda América Latina.

En 2013 Zuluaga acompañó al expresidente Uribe en la fundación del Centro Democrático y logró posicionarse para ser elegido candidato presidencial y pasar a la segunda vuelta, en la que finalmente resultó reelegido el ahora mayor contradictor de Uribe, Juan Manuel Santos.

Tres días antes de que se anunciara formalmente la candidatura de Zuluaga, el 22 de noviembre del año en curso, los precandidatos Juan Carlos Echeverry, David Barguil, Federico Gutiérrez, Alex Char y Enrique Peñalosa, declaraban que irían juntos a una consulta para elegir candidato presidencial en marzo y que no cerraban la puerta a quien resultara seleccionado como candidato del Centro Democrático.

Hay quienes sugieren que lo hicieron como reacción a un posible triunfo de la senadora María Fernanda Cabal, quien ha sido crítica del actual gobierno y abiertamente sostiene tesis propias del liberalismo económico y el conservatismo político. Algo que se ha tachado peyorativamente en los medios como “extrema derecha”, pero que motiva a sectores importante del electorado, como lo reflejaban las encuestas nacionales de intención de voto.

Zuluaga tendrá que decidir se acepta la invitación que le han hecho para participar en la consulta de la “coalición por Colombia”, en la que están también el partido de la U y el partido Conservador (este último mucho más estructurado y disciplinado).

No se debe olvidar que el conservatismo fue la fuerza que permitió la elección de Álvaro Uribe en primera vuelta en 2002, pues decidió retirar el apoyo a su candidato oficial y asumir una de las jefaturas de debate de Uribe. Es decir, es el aliado natural del uribismo en las elecciones y lo ha sido, con la única excepción del periodo 2014-2018, desde hace veinte años.

La trayectoria política del candidato presidencial del Centro Democrático es amplia e incluye el ejercicio del control político a nivel municipal y nacional, el gobierno local y nacional, y la exitosa gestión como Presidente de una de las más importantes empresas de Colombia. Sin embargo, cuando se trata de acercarse a una coalición emergente lo más importante es tener un nicho consolidado, por lo que el primer paso debe ser garantizar el apoyo de toda la militancia del Centro Democrático, de los directorios del partido y de los representantes que hoy ejercen en los diferentes cuerpos colegiados de elección popular a nivel local y nacional. De lo contrario, en marzo es probable que la división interna termine por favorecer otras candidaturas.

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