Un juez de Estados Unidos dictaminó el pasado viernes que los bonos 2020 de la petrolera estatal de Venezuela PDVSA son «válidos y exigibles».
Los bonos están respaldados por la mitad de las acciones de la filial de PDVSA, el refinador estadounidense Citgo Petroleum Corp. El pasado año el equipo de Juan Guaidó, el presidente encargado de Venezuela, presentó una demanda para declarar los bonos inválidos con el argumento de que el gobierno venezolano de Nicolás Maduro los había emitido sin la aprobación de la Asamblea Nacional, controlada por la oposición.
Guaidó ha calificado como «injusta» la decisión adoptada por el tribunal de EEUU.
Citgo es la mayor empresa Venezolana con activos en el exterior. El Gobierno del tirano Nicolás Maduro emitió los bonos Pdvsa 2020 y puso como garantía el 50,1 % de los activos de Citgo, una decisión que debió contar con el aval del Parlamento, de notable mayoría opositora, que nunca se produjo. Desde 2017, Venezuela ha presentado retrasos en el pago de la deuda contraída por estos bonos, por lo que los acreedores han tratado de acceder a la garantía de las acciones de Citgo.
Para el Gobierno interino de Guaidó, la emisión de dichos bonos fue fraudulenta, por lo que la sentencia del juez estadounidense de que son «válidos y exigibles» es un jarro de agua fría, aunque desde el equipo del presidente encargado recuerdan que en ningún momento han pretendido repudiar esta deuda ni, en general, el resto de reclamaciones privadas en contra del Estado. El Gobierno Interino de Guaidó ha expresado permanentemente su intención de que el Estado venezolano pueda cumplir con las obligaciones legítimamente contraídas.
La oficina de comunicación de Guaidó ha comunicado que el equipo legal de la junta administradora ad hoc de PDVSA buscará apelar la decisión que consideran «injusta».
El oro venezolano en Inglaterra
Esta sentencia se suma a la que emitió al principios de octubre el Tribunal de Apelación de Londres que anulaba el veredicto emitido por el Tribunal Superior en el que se le otorgaba a Juan Guaidó la administración de los lingotes de oro depositados en el Banco de Inglaterra (BoE).
El Banco de Inglaterra se negó a liberar el oro venezolano, después de que el gobierno británico a principios de 2019 se uniera a docenas de naciones para respaldar a Guaidó sobre la base de que la victoria electoral de Maduro el año anterior había sido manipulada.
La decisión significó que el caso volviera al Tribunal Superior para que determinara de manera más definitiva cuál de los dos líderes venezolanos tiene control sobre el metal.
En los últimos dos años, de las bóvedas del Banco Central en Venezuela han salido unas 30 toneladas de oro para ser vendidas en el exterior y dar liquidez al Gobierno de Maduro, según personas familiarizadas con las operaciones del banco.
