El torero Pepe Luis Vázquez Silva ha fallecido en Sevilla a los 67 años en la finca familiar del término municipal de Carmona, donde ha sido hallado muerto tras sufrir un ictus. El mundo del toro, que también llora la reciente partida de Paco Camino, se viste de luto en su memoria.
Nacido en Sevilla el 9 de junio de 1957, ilusionó a la afición hispalense durante su periplo como novillero y enamoró a los tendidos por la naturalidad con la que se paseó por los ruedos. Debutó en la Real Maestranza en 1979, en una novillada en la que no tuvo suerte, pero su prestigio se vio realzado con su inclusión en distintos festejos mixtos que le permitieron hacer el paseíllo junto a los principales matadores del escalafón.
Tomó la alternativa el 19 de abril de 1981, con su tío Manolo Vázquez como padrino y Curro Romero como testigo. Con la pureza como bandera, no tuvo la rotundidad necesaria para encaramarse a los más altos puestos del escalafón, pero sí firmó faenas muy recordadas y celebradas por la crítica, caso de su paso por las Colombinas de Huelva en 1984, cuando cortó tres orejas a un toro de Jandilla, o de su actuación en el San Isidro de 1985, cuando firmó una sublime actuación ante un toro de Torrealta.
Castigado por los toros, el tiempo fue reduciendo su presencia en los carteles hasta su despedida formal, anunciada en septiembre de 2012 en Utrera, junto a Morante de la Puebla. El cigarrero también se acuarteló con Pepe Luis en 2017, cuando decidió volver a los ruedos de forma puntual. Hizo el paseíllo en Illescas y pasó por otras plazas como Aranjuez o Granada, donde triunfó a lo grande durante la Feria del Corpus. Un año después, en 2018, hizo el paseíllo en la Real Maestranza de Caballería, en el marco del tradicional festival del 12 de Octubre.
Tras retirarse definitivamente de los ruedos, sufrió en 2019 un primer ictus que afectó a su movilidad en la parte derecha de su cuerpo. Desde entonces, se ha mantenido relativamente apartado de la vida pública, con la salvedad de algunos actos sociales en su ciudad. Ahora, en 2024, Sevilla llora el adiós de un torero de culto, perteneciente a una saga taurina de referencia.