La tauromaquia no atraviesa un momento sencillo en Venezuela. El colapso social y económico que ha propiciado el socialismo bolivariano en el país se ha traducido en una drástica disminución del número de corridas programadas en sus plazas de toros. Con todo, la afición venezolana sigue resistiendo a su manera y, de hecho, ha acudido con intensidad a los festejos programados en las plazas de San Cristóbal y Mérida.
Muy notables fueron las cifras de público de la Feria de San Sebastián programada en la ciudad de San Cristóbal. La capital del Estado Táchira, ubicada a menos de 60 kilómetros de la frontera con Colombia, fue fundada por el capitán del Ejército español Juan Maldonado Ordóñez y Villaquirán en marzo de 1561 y cuenta con una población de casi medio millón de habitantes.
Desde hace casi seis décadas, San Cristóbal acoge un interesante serial taurino con motivo de las fiestas de San Sebastián. El pasado 2023, LA GACETA informó de las excelentes cifras de público que cosechó la plaza, con un cartel en el que se rozaron los 16.000 espectadores. La evolución al alza del coso ha quedado confirmada en 2024.

La empresa programó una primera corrida con Ginés Marín, Jesús Enrique Colombo e Isaac Fonseca, que lidiaron toros de Rancho Grande, El Prado y La Consolación. El coleta extremeño cortó una oreja mientras que el matador venezolano salió por la Puerta Grande, todo ante unas 8.000 personas que cubrieron medio aforo. La segunda tarde fue un festejo con toros de Campolargo y la presencia de Daniel Luque y Emilio de Justo, que cortaron tres y cuatro orejas cada uno. Completaba la terna Marcos Peña, que fue silenciado. De nuevo, unas 8.000 personas llenaron alrededor del 50% del coso.
Faltaba la ‘traca final’, lastrada por la lesión de última hora que sufrió El Fandi. El ‘mano a mano’ entre Manuel Escribano y Jesús Enrique Colombo fue un éxito de público, con 16.000 personas llenando la plaza. Los toros de la vacada más añeja, Los Aranguez, dieron oportunidades a ambos matadores, que cortaron respectivamente tres y cuatro orejas.
Buenas entradas en Mérida
La tónica positiva se mantuvo en la Feria del Sol de Mérida, donde la primera de feria citó a unos 8.000 espectadores. Se lidiaron toros de Los Aranguez. El Fandi reapareció tras meses aquejado por sus lesiones de espalda y se acarteló junto a Francisco de Manuel, que tocó pelo, y José Antonio Valencia, aplaudido en sus dos toros.
Un día después, la plaza reunió a 8.000 personas en una corrida con toros de El Prado y Rancho Grande y la presencia del rejoneador Francisco Javier Rodríguez, que cortó una oreja tras lidiar un ejemplar de Los Marañones, y los matadores Daniel Luque, Jesús Enrique Colombo y Antonio Suárez. El de Gerena cortó dos orejas a un toro de regalo que lleva el hierro de la ganadería colombiana de Juan Bernardo Caicedo, mientras que el venezolano cortó dos orejas a su primera e indultó a su segundo, de Rancho Grande.
Cerró la feria una corrida mixta con cuatro toros de Juan Bernardo Caicedo para Alejandro Talavante (que cortó cuatro orejas) y Jesús Enrique Colombo (que sumó dos trofeos), dos novillos del mismo hierro para Marco Pérez (que indultó dos astados, cortando cuatro orejas y dos rabos simbólicos) y un burel para la lidia a caballo de Francisco Javier Rodríguez (que escuchó palmas).
