El número de festejos taurinos mayores celebrados en España durante el primer trimestre de 2022 se situó en 37. La previsión hoy para este año –en el mismo periodo– eleva esta cifra hasta los 42 espectáculos. Se constata así la senda de crecimiento de la tauromaquia, con una subida del 14% que continúa el aumento observado el pasado año, cuando el número de espectáculos organizados en las plazas de nuestro país creció otro 14%.
Cada año, el arranque de la temporada está marcado por un intenso calendario de festivales taurinos. Este tipo de festejo, en el que los actuantes visten de corto, a la usanza campera, suele tener fines benéficos y acostumbra a reunir a cinco toreros y un novillero con novillos-toros de distintas ganaderías. Para los toreros, estos eventos sirven como una suerte de pretemporada, en la medida en que suponen un primer contacto con las plazas y el público, preparando la mente y el cuerpo para los compromisos más importantes del circuito.
Si tomamos como referencia todos los festivales anunciados hasta ahora y los sumamos a los festejos mayores programados en las plazas españolas, encontramos que la cifra total de festejos roza los 60 espectáculos. Como explica un empresario a este diario, «desde el punto de vista económico, organizar un festival de primer nivel en una plaza de Tercera categoría cuesta unos 60.000-65.000 euros, mientras que programar una corrida de toros de relumbrón supone un desembolso de 70.000-75.000 euros. Por lo tanto, es mucho más fácil defender económicamente el festival que la corrida, lo que también contribuye en la proliferación de este tipo de espectáculos».
Este 2023, destaca el compromiso de Cayetano Rivera Ordóñez, quien ha anunciado una ‘Temporada Solidaria’ y ha defendido su presencia en estos festejos por su naturaleza benéfica, apelando a “la importancia de ayudar a los demás, algo que siempre me enseñaron en mi casa».
Las causas que apoyará Cayetano en esta ‘Temporada Solidaria’ de 2023 abarcan campos muy diversos: cuidado de mayores, inclusión de personas con síndrome de Down, apoyo a instituciones caritativas, etc. También destaca el compromiso del mediático torero andaluz con aspectos más referidos a la Fiesta, caso de la financiación de la investigación y la formación en el campo de la cirugía taurina o la recuperación de plazas que llevaban años abandonadas.
Los festivales también están asociados a la reaparición de toreros que han dejado de estar en activo. Un caso evidente es el de Jesús Janeiro, Jesulín de Ubrique, que lleva años sin vestirse de luces pero ha mantenido una presencia recurrente en este tipo de festejos, anunciándose cada verano en numerosos pueblos, a menudo acartelado con un rejoneador o novillero local y en formato de cuatro novillos.
A lo largo de una temporada normal se celebran más de 200 festivales que representan alrededor del 15% de los espectáculos taurinos anunciados en nuestro país. Además de los primeros meses del año, el tramo final de temporada también acostumbra a estar poblado por este tipo de festejos. Uno de los más prestigiosos es el Festival del 12 de Octubre, Día de la Hispanidad, programado cada año en la Real Maestranza de Caballería de Sevilla y celebrado a beneficio de la obra social que desempeñan las principales cofradías hispalenses.
