Tras catorce años de «cerrojazo» por la totalitaria censura de la izquierda, los toros han vuelto por la Puerta Grande a Valdemoro, con un lleno de «no hay billetes» que certifica el interés por la Fiesta de los vecinos de la localidad madrileña. El suceso llega apenas una semana después de la reapertura de Móstoles, donde también se han vuelto a dar corridas de toros tras un largo parón.
El festejo programado para el regreso de las corridas a Valdemoro formaba parte de la Copa Chenel que impulsa la Fundación Toro de Lidia en la Comunidad de Madrid y reunía en el cartel a Thomas Joubert, Molina y Víctor Hernández. Se reseñaron seis toros para la ocasión, tres del hierro de Ángel Luis Peña y otros tantos de la ganadería de Flor de Jara. A la conclusión del paseíllo sonó la Marcha Real entre los aplausos y vítores de los asistentes, que llenaban las 3.000 localidades del coso.
La tradición de los toros en Valdemoro se remonta siglos atrás en el tiempo, puesto que en la Edad Moderna ya se programaban festejos de este tipo cuando la Corte pasaba por el municipio, camino al Real Sitio de Aranjuez. De hecho, el pintor Francisco de Goya retrató a La Pajuelera, mítica torera de Valdemoro, en uno de sus grabados.
Hace catorce años, la izquierda tomó la decisión de poner punto y final a la larga tradición taurina de Valdemoro. PSOE, Podemos e IU unieron sus fuerzas para liquidar las corridas de toros, y los encierros y capeas que se programaban cada mes de septiembre, coincidiendo con las fiestas patronales del municipio madrileño.
Las elecciones municipales celebradas en junio del pasado 2023 propiciaron un vuelco político en el consistorio. David Conde, del PP, fue elegido alcalde con el apoyo de los once representantes de su formación, así como de los cuatro ediles de Vox y el representante de una coalición local denominada Vecinos por Valdemoro.
Tras la reactivación de los toros con la corrida de la Copa Chenel celebrada el 4 de mayo, la corporación ya se ha puesto a trabajar en nuevos avances. En declaraciones a Mundotoro, el gobierno local reconoce que “es pronto para adelantar cómo vamos a recuperar el número de festejos taurinos, los encierros, las capeas o el toro del chocolate, pero ese es nuestro objetivo y trabajaremos que para lograrlo”.
La plaza “ha necesitado una puesta a punto debido al largo parón de los últimos años. Hemos renovado el albero, la puerta de chiqueros, los accesos… Además, se ha pintado el coso, se han cambiado las maderas de las barreras y los burladeros, se han adecuado los baños… Así queremos demostrar a los empresarios que esta plaza va a cumplir con los máximos estándares.
