El número de nuevas contrataciones se desplomó un 28,2 % este verano, respecto al pasado, pese al tirón de la restauración y la agricultura, que siguieron siendo una vez terminó el estado de alarma las actividades en las que más se contrató, aunque bastante menos que un año antes.
Según los últimos datos de los Servicios Públicos de Empleo (SEPE) recogidos por Efe, durante julio y agosto se llevaron a cabo en España 2,6 millones de contratos de trabajo, cifra que contrasta con los 3,7 millones del mismo periodo del año anterior.
Todos los sectores económicos registraron descensos en sus contrataciones, con caídas del 14,5 % en industria, con 332.732 contratos; del 11,9 % en agricultura, con 318.405, y del 5,9 % en construcción, con 184.297, mientras que el sector servicios registró el mayor recorte, del 33,9 %, con 1,8 millones de contratos.
Dentro de este, los servicios de comidas y bebidas, aunque siguieron tirando del empleo con 319.878 contratos durante julio y agosto pasados, recortaron sus contrataciones el 46,8 % respecto a los 600.000 del año anterior.
Junto a la restauración, los servicios de alojamiento contabilizaron 70.562 contratos, el 66 % menos, de forma que las contrataciones de la hostelería se quedaron en la mitad de los 808.000 del verano de 2019.
Por detrás, la actividad que mayor número de contratos realizó fue la agricultura, ganadería y caza, con 306.208, aunque también se redujeron, un 12 %, respecto a julio y agosto de 2019.
Asimismo, destacan los 186.805 contratos del comercio minorista (25,6 % menos), los 131.037 de los servicios a edificios y actividades de jardinería (16,5 % menos), los 120.390 de la industria de la alimentación (12,6 % menos) o los 113.148 de almacenamiento y actividades anexas al transporte (7,6 % menos).
Así, CCOO critica que pese a la escasa contratación generada en los meses estivales, continúan las características del empleo en España: temporal, con elevada rotación y con un elevado número de contratos por persona.
UGT, por su parte, exige derogar la actual legislación laboral e implantar un nuevo modelo que prime el empleo indefinido, de calidad, con derechos y bien remunerado.
Calviño defiende centrar los ERTE en empresas necesitadas más que en sectores
La vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha defendido este lunes la necesidad de centrar los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) en empresas necesitadas que sean viables más que en sectores específicos.
«No se trata tanto de una cuestión de sector como de concentrar los esfuerzos en las empresas que verdaderamente más lo necesitan», ha argumentado la vicepresidenta en una entrevista en TVE al ser preguntada sobre las negociaciones para extender los ERTE extraordinarios más allá del 30 de septiembre.
«Tenemos que asegurarnos de que se cubre a las empresas que verdaderamente eran solventes antes, están en una situación transitoria» y van a poder reactivarse en el futuro «en lugar de cubrir demasiado y no tener un impacto», ya que se trata de una medida con un «importante coste presupuestario».
A ese respecto y ante las críticas de los agentes sociales, Calviño ha insistido en que hay «una transparencia total» sobre el coste de las medidas, que además han sido «tremendamente eficaces» para proteger el empleo, como prueba que cada día entre 4.000 y 5.000 personas salen de los ERTE para incorporarse a sus puestos de trabajo.
Con respecto a los futuros presupuestos de 2021, Calviño ha instado a lograr una amplia mayoría parlamentaria y, aunque ha evitado comentar medidas concretas, como posibles subidas de impuestos, ha admitido que «se pueden producir ajustes en tipos impositivos» o bonificaciones que no estén siendo efectivas para lograr un sistema fiscal «más justo».
También ha defendido que la fusión de Bankia y Caixabank será positiva para la participación del Estado, ya que «las perspectivas de beneficios de la entidad resultante son superiores a las que habríamos tenido de mantenerse separadas».