La posición de inversión internacional (PII) neta de España -la diferencia entre la inversión en el exterior y la procedente del exterior- aumentó en el segundo trimestre hasta registrar un saldo negativo de 908.400 millones de euros, lo que equivale al 77,5 % del PIB.
La PII ha aumentado notablemente con respecto al primer trimestre, cuando era negativa por 878.400 millones, un 71 % del PIB, debido en gran parte a la caída del propio PIB, según apunta el Banco de España en los datos trimestrales de la balanza de pagos y la posición de inversión internacional publicados este miércoles.
Ese balance incluye todos los compromisos de pago que la economía española tiene con el exterior (deuda pública, préstamos con entidades extranjeras, etc) y que conforman la deuda externa bruta, que en el segundo trimestre alcanzó los 2,21 billones (188,3 % del PIB), por encima de los 2,15 billones (173,8 % del PIB) del primer trimestre.
La institución detalla que el saldo neto del Banco de España frente al exterior se incrementó hasta los 240.800 millones, frente a los 199.800 millones del primer trimestre, mientras que la PII una vez excluido el banco central fue menos negativa gracias a la aportación positiva de las transacciones.
El superávit por cuenta corriente bajó hasta los 1.400 millones, desde los 11.000 millones del segundo trimestre de 2019, debido «a la desaparición del saldo turístico».