La Comisión Europea ha aprobado este lunes la revisión del plan de recuperación de España, que supone la entrega de un total de 93.500 millones de euros adicionales para España: 7.700 millones de ellos en transferencias y 83.200 millones de euros en préstamos. A este dinero venido de Bruselas se unirán los casi 2.600 millones de euros del nuevo mecanismo para financiar la transición verde —RepowerEU—.
Esta partida se suma a los 37.036 millones de euros que España ha recibido hasta la fecha y abre también la puerta a la solicitud de forma «inminente» del cuarto pago de 10.000 millones de euros. Por este motivo, España podrá recibir los primeros 1.400 millones de euros a modo de prefinanciación —un 20% del total previsto para inversiones—, una vez que los 27 Estados miembros den su visto bueno en un máximo de cuatro semanas a la decisión presentada este lunes por Bruselas.
El nuevo plan incluye la simplificación de los procedimientos de concesión de permisos para la producción de energías renovables y para las infraestructuras de la red eléctrica, así como siete nuevas inversiones en energía renovable y transición ecológica. Algunos ejemplos concretos son un sistema de apoyo a la producción y adopción de hidrógeno renovable o un sistema de subvenciones para apoyar la cadena de valor de la energía renovable y el almacenamiento de energía, entre otros.
Entre todas las modificaciones, destaca la eliminación del plan para introducir el pago de peajes en autopistas a partir de 2024. Ya no será obligatorio pagar en las carreteras españolas, aunque el Gobierno se ha comprometido a impulsar el transporte ferroviario.
Con todo esto, España ha logrado la máxima calificación en la aplicación del plan, a excepción del punto relativo al «Estimaciones de costes razonables y plausibles», que se aplica a los planes de todos los Estados miembro porque Bruselas considera «imposible» tener una estimación ‘ex ante’ de los costes de forma «precisa».