El paro real en noviembre se ha situado en alrededor de 3,3 millones de personas, tras la destrucción de 118.000 empleos en la hostelería debido al fin de la temporada turística. En comparación con el paro registrado en las oficinas de los servicios públicos, que podría incrementarse por la caída de los contratos de fijos discontinuos y las conversiones a indefinidos, se observa una brecha de 700.115 personas.
La afiliación total a la Seguridad Social ha disminuido en 30.051 personas, el peor dato para un mes de noviembre desde 2019, mientras que la contratación lo hizo en un 14,77 % respecto a octubre, con una caída del 18,02% en el caso de los indefinidos. En esta línea, Randstad Research asegura el ligero descenso del paro ofrece indicios de debilidad.
Además, desde Randstad advierten de que los datos de noviembre no muestran las empresas afectadas por la DANA de Valencia hayan acudido a los ERTE para afrontar la situación. Señalan que, «en el caso de la Comunidad Valenciana, el total de afectados en noviembre se ha elevado hasta los 2.055. Pese a los incrementos experimentados, las cifras siguen siendo muy modestas y afectan a menos de 1 de cada 1.000 trabajadores en la provincia».
Por ello, esperan crecimientos a partir de los próximos meses, ya que los afectados «sólo llegan a la estadística cuando se han gestionado administrativamente los expedientes», por lo que no hay que descartar un nuevo aumento a partir de diciembre.