La producción de petróleo en Argentina está alcanzando niveles que no se veían en más de dos décadas, impulsada por la liberalización del sector energético tras la aprobación de la ley Ómnibus bajo el gobierno de Javier Milei. Esta legislación ha generado un ambiente propicio para que las compañías petroleras aumenten sus inversiones, lo que está llevando a un incremento notable en la producción de crudo, especialmente en el yacimiento de Vaca Muerta, que ha alcanzado niveles récord. Este auge en la producción se extiende también a otras cuencas hidrocarburíferas, que comienzan a mostrar signos de revitalización. La llegada de Milei al poder ha generado una ola de optimismo en la industria petrolera argentina, que había sufrido años de estancamiento.
Desde su llegada al cargo en diciembre de 2023, el presidente Javier Milei ha implementado una serie de medidas económicas que han tenido un impacto significativo en el país. El déficit fiscal primario ha sido prácticamente eliminado, la inflación ha mostrado signos de desaceleración, las reservas internacionales han aumentado, y la brecha cambiaria se ha reducido. Estas mejoras han sido reconocidas por instituciones internacionales como el Fondo Monetario Internacional y S&P Global Ratings, que ha elevado la calificación crediticia de Argentina tanto en moneda local como extranjera.
Uno de los logros más notables, aunque menos publicitados, del gobierno de Milei es la revitalización del sector petrolero. Según un informe reciente de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), la producción de crudo en Argentina aumentó en 20.000 barriles por día en julio, alcanzando los 810.000 barriles diarios, una cifra que no se veía desde principios de 2002. Este crecimiento ha sido liderado por empresas como Vista Energy y la estatal YPF, que han incrementado sus operaciones de fracking a un ritmo acelerado.
La apertura del sector petrolero a la inversión extranjera y la creación de un marco jurídico más estable están impulsando a las empresas a expandir su capacidad de producción, tanto en el presente como en el futuro. La AIE proyecta que, para 2025, Argentina podría alcanzar una producción cercana a los 900.000 barriles diarios de crudo, consolidando su posición como un actor clave en el mercado global de hidrocarburos.
El impulso en la actividad petrolera ha sido principalmente atribuible a Vaca Muerta, el vasto yacimiento de shale oil en la cuenca de Neuquén. Desde el inicio del año, la producción de este tipo de petróleo ha aumentado en 30.000 barriles diarios, y se espera un crecimiento adicional de 50.000 barriles diarios en 2024, lo que elevaría la producción total anual a 810.000 barriles por día, según la AIE.
Especialistas como Juan Cruz Díaz, director general, y Macarena Michienzi, experta principal en Cefeidas Group, señalan que la ley Ómnibus recientemente aprobada ha introducido cambios significativos en el sector del petróleo y gas. Esta reforma elimina gran parte de la intervención gubernamental en el mercado, permitiendo que las empresas de hidrocarburos comercialicen sus productos libremente, tanto a nivel nacional como internacional. Además, la eliminación de controles de precios que anteriormente distorsionaban la inversión y la expansión del sector está generando incentivos para la producción y exportación de hidrocarburos. Aunque estas medidas podrían provocar un aumento inicial en el precio de algunos combustibles, se espera que a largo plazo fomenten un incremento en la oferta, estabilizando el mercado de manera más sostenible.