Este verano, España ha completado 30 meses consecutivos como el país de la Unión Europea con mayor tasa de desempleo. Sólo en enero de 2022 fue superada por Grecia de manera puntual, lo que elevaría el total a 39 meses si no fuera por esa excepción.
Desde febrero de 2022, España ha mantenido una distancia creciente con Grecia en términos de paro, mientras que Italia ha logrado reducir su tasa de desempleo, pasando del tercer al décimo puesto en la lista de países con más paro. A pesar de algunos avances, España sigue siendo el país con la tasa de desempleo más alta en el continente, lo que refleja la falta de progreso en los últimos dos años y medio, según los informes de Eurostat que ha analizado The Objective.
En julio de 2024, la tasa de paro en España fue del 11,5%, muy por encima del 9,9% de Grecia y del 6% de la media europea. Este dato también es considerablemente mayor que el de Suecia (8,6%), Finlandia (8,5%) y Lituania (8%). España sigue siendo el único país con una tasa de desempleo en dos dígitos, con una brecha de 5,5 puntos porcentuales respecto a la media de la Unión Europea (UE), casi el doble.
En el caso de las grandes economías europeas, la comparación resulta aún más desfavorable. Francia registró un 7,5% de paro, Italia un 6,5%, y Portugal un 6,2%. Países Bajos y Alemania, por su parte, tienen algunas de las tasas más bajas, con 3,6% y 3,4%, respectivamente.
Si bien el desempleo en España ha disminuido un 9% en los últimos dos años y medio, comparado con el 2% de la UE y el 4% de la eurozona, el país partía de una base muy alta, con un 13,2% de desempleo. Esto se debió, en parte, al deterioro del mercado laboral durante la crisis y las medidas de los ERTE. En ese momento, España tenía 3,1 millones de desempleados, que representaban el 27% del total en la UE. Aunque la cifra actual es de 2,8 millones, todavía supone el 26% de los desempleados de la UE y el 21% de los de la eurozona.
El problema no radica sólo en los datos recientes, sino en la tendencia persistente. España ha ocupado el primer puesto en desempleo en la UE durante 30 meses consecutivos, consolidando esta situación como un desafío estructural sin solución a la vista, tal como ha señalado el Banco de España.
El desempleo juvenil en España también sigue siendo alarmante, con una tasa que supera en 15 puntos la media general. En julio de 2024, el paro juvenil alcanzó el 25,5%, siendo el más alto de la UE, seguido por Suecia (24,2%), Rumanía (23,2%) y Estonia (22,8%). Mientras tanto, países como Francia, Grecia y Portugal registraron tasas más bajas, con Grecia en un 20% y Francia en un 17,2%. La media de la Unión Europea se situó en el 14,5%.