El plan de salidas de Telefónica se ejecutará a través de un expediente de regulación de empleo (ERE), el primero de la compañía desde 2013, según han confirmado los sindicatos, a los que todavía no se les ha trasladado el volumen total de empleados que se verán afectados por esta medida.
Telefónica ha informado a los sindicatos de que comenzará ya a desarrollar el proceso legal para la implementación de esta reducción de plantilla. La decisión supondrá la salida de un mínimo del 10% de los trabajadores en el conjunto de las filiales (suman unos 16.000 empleados), aunque fuentes sindicales señalan que afectará a 2.500.
Fuentes sindicales han recordado que la compañía ha justificado el «excedente funcional» de trabajadores con arreglo a la modificación de los servicios de la empresa, a la finalización del despliegue de fibra óptica hasta el hogar (FTTH), al cierre del cobre y a otros elementos. «Los detalles y la negociación corresponderán a las mesas que cada uno de los comités intercentros deberán constituir y se acomodarán a los plazos legales marcados para ello», ha manifestado UGT.