«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
20 de junio de 2022

Días contados

Pedro Sánchez. Europa Press

La aplastante y merecida victoria del presidente Moreno Bonilla en Andalucía ha sido saludada con una enorme satisfacción… por la izquierda. Esto, que podría parecer un síntoma de alguna patología mental, no lo es. Todo lo contrario. El temor a que Vox, garantía de un cambio real, entrara en el Gobierno de Andalucía ha sido uno de los grandes motores de la campaña electoral y el primero de los objetivos de las formaciones andaluzas y de los medios establecidos. Así lo confesó, justo antes de presentar su dimisión, el candidato del extinto partido Ciudadanos, el todavía vicepresidente Marín. Que el PSOE, con su peor resultado histórico y que Podemos y sus escisiones, con un puñado de escaños, también se felicitaran en la derrota como si fueran los héroes de la trinchera del sistema frente a Vox, es risible, pero relevante.

Y decíamos que esto es lo normal. La mayoría absoluta de Moreno Bonilla, sin la necesaria tutela de Vox, es la mejor de entre las pésimas noticias para la izquierda porque anticipa que nada de lo necesario va a cambiar. El sistema implantado por el socialismo haca décadas y no corregido por el PP y sus extintos socios de Ciudadanos se va a mantener en lo sustancial. El marco mental de sumisión a lo público no cambia. Todas las leyes ideológicas continuarán. El mundo de la subvención a las redes clientelares de la izquierda se sostendrá. El PP, como lleva haciendo tantos años, aceptará el desplazamiento de la Ventana de Overton hacia la izquierda sin pelear la libertad y la soberania a cambio de gestionar, que no es poco, pero insuficiente.

Pero que la realidad de lo que sabemos que ocurrirá, porque tenemos fresca en la memoria para lo que sirvieron otras mayorías absolutas del PP, no nos distraiga hoy de las buenas noticias. El socialismo y el comunismo han recibido un durísimo correctivo en las urnas y aunque unas elecciones regionales no sean anticipo de nada, hoy estamos más cerca del fin del sanchismo que ayer. Vox, el partido que hace tres años y medio dudaba si presentarse a las elecciones y hoy es la tercera fuerza andaluza, aunque lejos de sus expectativas, tomará buena nota de los errores y de los aciertos y trabajará duro de cara a las elecciones municipales y autonómicas de 2023, que, estas sí, anticiparán las generales. La versión más oscura y penosa del socialismo en España tiene sus días contados. Lo que no sabemos es cómo de largos se nos van a hacer.

Noticias de España

.
Fondo newsletter