Tras las recientes inundaciones en Valencia, la empresa pública Aguas de las Cuencas Mediterráneas (Acuamed) ha subrayado que su actuación se limita a los encargos específicos que recibe del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico. Las competencias para prevenir desastres naturales como este recaen principalmente en dicho ministerio y en la Confederación Hidrográfica del Júcar.
Desde Acuamed aclaran que no tienen asignada ninguna intervención específica en las zonas afectadas. De hecho, remarcan que «no se recuerda ningún trabajo relacionado con la prevención de inundaciones en esa área durante los últimos ocho años». La empresa insiste en que su papel es únicamente ejecutar las obras que se les encomiendan, siguiendo lo estipulado en su Convenio de Gestión Directa, que también establece cómo financiar estas actuaciones, detalla este miércoles The Objective.
Aunque Acuamed tiene entre sus atribuciones algunas obras relacionadas con la protección contra inundaciones, asegura que estas son «muy concretas y delimitadas». Su actividad principal se centra en proyectos de desalación y transporte de agua, como la construcción de desaladoras y conducciones para hogares, industrias y el sector agrícola. Según explican, sólo actúan cuando se lo solicita el ministerio, tras determinar este si hay riesgos que justifiquen una intervención.
Por ejemplo, ante incidencias recientes, la empresa gestionó la conducción del Júcar y Vinalopó, donde un problema en el bombeo ya ha sido resuelto, y la del Turia y Sagunto, obligando a suministrar agua desde la desaladora de Sagunto hasta que se reduzca la contaminación. También están evaluando los daños sufridos por los sistemas de filtros verdes en la Albufera de Valencia y en el nuevo colector oeste, que aún estaba en fase de construcción.