«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Aprobada la ley que regula la venta de sustancias para fabricar explosivos

El pleno del Senado ha aprobado el proyecto de ley sobre precursores de explosivos, una norma que regula la compraventa de sustancias que, aún siendo legales, pueden utilizarse para la fabricación casera e ilícita de explosivos como los utilizados en los últimos atentados ocurridos en Europa.

Se trata de la aplicación a España de una normativa europea diseñada para el control de sustancias que, como han explicado los portavoces de los grupos, pueden utilizarse para procesar droga y fabricar explosivos como el conocido como «madre de satán», el triperóxido de triacetona, el que pretendía usar la célula de Alcanar.

Tanto el senador que ha defendido el proyecto, José Cruz Pérez Lapazarán (PP), como los portavoces del PSOE, Podemos, PNV o Foro han manifestado su respaldo a esta iniciativa para mejorar las herramientas del Estado de Derecho en su lucha contra el terrorismo.

El propósito es dificultar la fabricación ilícita de explosivos, servir como instrumento jurídico para regular la comercialización de estas sustancias y garantizar el correcto seguimiento de estos productos, con la adecuada comunicación sobre las transacciones sospechosas en todas las fases de la cadena de suministro y uso de estas sustancias.

Culmina así la tramitación del proyecto de ley que, entre otras cuestiones, obligará a los particulares a contar con una licencia.

Las excepciones

No obstante, estará exento de esta licencia el uso profesional o industrial por las empresas de estas sustancias, como son fertilizantes, herbicidas, pesticidas, algunas conservantes, desinfectantes e, incluso componentes de champús y pastas de dientes.

La licencia que propone el proyecto no va a afectar en la práctica al consumidor que compra productos de droguería, de limpieza o para otros usos cotidianos que contienen esas sustancias, como son detergentes, blanqueantes, quitaesmaltes, tintes de peluquería o pastillas para barbacoas, entre otros.

El motivo es que el nivel de concentración de sustancias precursoras que contienen estos productos está por debajo del que exige la obtención de una licencia para su adquisición.

Frente a ellos, sí están por encima de ese nivel ciertos combustibles que se utilizan comúnmente en automodelismo y aeromodelismo (nitrometano), productos para grabados de metales en bellas artes y joyería (ácido nítrico), productos para el pavonado de metales que eviten su corrosión, utilizados por aficionados a las bellas artes y a las armas (clorato potásico) o herbicidas (clorato sódico), para cuya compra se exigirá licencia.

Alguna publicidad valiente y la ayuda desinteresada de muchos lectores como tú han hecho posible esta noticia. Conoces nuestra línea editorial, a contracorriente de la ideología dominante y desacomplejadamente comprometida con la dignidad humana, la unidad de España y la identidad de Europa. No es fácil ni es barato sostener un medio de comunicación que beba de estos postulados, siempre contra los más poderosos. Por eso te pedimos que nos ayudes con una aportación, que formes parte de nuestro proyecto, que ayudes a que sigamos incordiando al Poder. Puedes hacerlo de varias maneras, infórmate aquí.

TEMAS |
+ en
.
Fondo newsletter