La presidenta del PP de Navarra, Ana Beltrán, alerta de la «batasunización» la Comunidad Foral y tilda la decisión de «muy grave» y «aberrante».
El Gobierno navarro que preside Uxue Barkos ha vuelto a dar un giro «euskaldún» al imponer el euskera en las empresas que quieran ser subcontratadas por las Administraciones Públicas para trabajos que requieran atención al público.
Etas entidades deberán tener un plan de euskera, una lengua que es hablada habitualmente por solo el 6,7% de la población y por el 2,9% en la comarca de Pamplona, «para que los trabajadores puedan formarse» tras aprobar el Parlamento -con el apoyo socialista- la Ley Foral de Contratos Públicos.
La Confederación de Empresarios de Navarra ya ha advertido de que esta ley «perjudicará a la igualdad de condiciones» y favorecerá la llegada masiva de contratos a empresas vascas. «Esta medida es una nueva imposición para las empresas navarras que afecta a su actividad y a su libre competencia, ya que las pymes y los autónomos tendrán más dificultades para acceder a contratos con la Administración Pública que las grandes compañías», ha dicho.
Desde el PP lo han considerado «muy grave» y han alertado además de que Navarra cuenta con una presidenta que quiere «hacer desaparecer su comunidad valiéndose de la imposición de símbolos, lengua y territorio». «Ha impuesto el euskera frente al español en los medios de comunicación, en la educación y en las comunicaciones oficiales», ha añadido.
.@javiergar_: «Votamos en contra de Ley de Contratos Públicos porque es aberrante que el cuatripartito quiera obligar a las empresas a desarrollar planes de euskera para optar a un contrato con la Admon» pic.twitter.com/NgsqiatpaT
— PP Navarra | PPN (@PPNavarra) 12 de abril de 2018
En la pasada Convención Nacional, la presidenta del PP regional, Ana Beltrán, ya alertó de que asisten a la «batasunización» la Comunidad Foral y reiteró que Navarra ha sido una comunidad próspera en los últimos 40 años hasta la llegada al poder del cuatripartito nacionalista.
«Contamos con una presidenta que está arrodillada ante Bildu y que ya ha dejado claro su hoja de ruta, que Navarra deje de ser una comunidad foral diferenciada dentro de España y que se convierta en una provincia más del País Vasco», dijo,, antes de señalar que para ello «se vale de la lengua, los símbolos y el territorio». «Imponen el euskera, en los rótulos y en la cartelería, en la Administración y en las empresas. Es algo aberrante», finalizó.