El Consejo de Coordinación se ha reunido este lunes por primera vez desde julio aunque ha preferido dejar este punto del orden del día para el final.
El partido de Pablo Iglesias comienza el curso político este lunes, -sólo a nivel interno porque en el Congreso ya arrancó con la comparecencia extra de Mariano Rajoy sobre la trama Gürtel-, marcado por las disputas internas.
A por otra moción contra Rajoy
Podemos «no dará un ultimátum» al PSOE para plantear una moción de censura al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al tiempo que está convencido de que «hay que dejar pasar el 1 de octubre», porque hasta entonces muchos partidos no se van a mover.
Así lo ha expresado en rueda de prensa, tras el Consejo de Coordinación, el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, quien ha apostado por una moción «constructiva» que pueda ganar «y que estaría encabezada -como no puede ser de otra manera- por el partido que más escaños pone».
Sin embargo, en el Consejo de Coordinación no se ha abordado un tema candente en Podemos, como es la rebelión de las comisiones de garantías, es decir, los órganos disciplinarios que han declarado nulos de pleno derecho los nuevos estatutos del partido.
Echenique ha admitido que el Consejo no ha reservado espacio para hablar de este asunto y, si finalmente se hace, sería a última hora y de «forma breve».
No obstante, el secretario de Organización de Podemos ha aprovechado la rueda de prensa para pedir a los cargos públicos de la formación que «dejen trabajar» a los órganos para resolver el conflicto. «Que sean los órganos que tienen competencia los que decidan, los demás acataremos las decisiones», ha subrayado.
Las dos crisis internas de Podemos
Dos son los frentes que continúan sin cerrarse después de un verano marcado por el silencio. Las discrepancias con la Comisión de Garantías y el constante enfrentamiento con el líder de la formación en Cataluña, Alberto Dante Fachín, han provocado que la formación morada vuelva a situarse en el centro de la polémica y no precisamente por su actividad parlamentaria.
La decisión de Pablo Iglesias de introducir un régimen disciplinario para sancionar a los militantes, así como los nuevos instrumentos de intervención de la cúpula sobre las direcciones regionales han hecho saltar las alarmas de los miembros de la formación.
Resoluciones que contrastan con la actitud regeneradora que han intentado implementar siempre desde la formación y que han seguido en la línea de los conflictos internos tras las reticencias entre ‘errejonistas’ y ‘pablistas’ o de otros tantas peleas vividas a nivel interno en la formación.
Pero la situación de la relación entre la cúpula de la formación y la delegación en Cataluña es aún peor. El posicionamiento del partido con respecto al referéndum del 1 de octubre ha hecho que la tensión entre Iglesias y Fachín sea más que evidente.
A nivel estatal, desde Podemos apuestan por mantener la ambigüedad y por defender el referéndum como vía para incidir, al mismo tiempo, en el mal denominado derecho a decidir. Sin embargo, desde Podem apuestan por apoyar de forma rotunda la consulta. Tanto es así, que incluso el líder en Cataluña ha participado este fin de semana en un acto denominado ‘¿Por qué el referéndum?’ con varios miembros de la CUP.
Ni siquiera se han puesto de acuerdo en la fecha de la consulta a la militancia de Podemos en Cataluña en la que decidirá el posicionamiento de la formación con respecto al referéndum después de que la cúpula estatal la retrasara una semana. Finalmente ha sido convocada para el 15 de septiembre con el objetivo de que se produjera después de la Diada aunque sí coincidirá con la campaña por el referéndum.
El secretario de Organización del partido, Pablo Echenique, ha sido el encargado de comparecer en medio de la reunión de la Ejecutiva del partido. Sin embargo, han preferido dejar este tema, -uno de los que más atención suscitan con respecto a la formación-, para después de la rueda de prensa.
«No hemos abordado el tema. Lo hablaremos después. Está en el orden del día pero será un punto breve porque la solución es evidente: que actúen los órganos. El Comité de Garantías es quien tiene que decidir sobre el expediente», ha explicado tras insistir en que goza de absoluta independencia.
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