El temporal que ha golpeado la Comunidad Valenciana ha generado pérdidas millonarias en la agricultura. Según datos proporcionados por la asociación agraria Asaja, los daños ascienden a 278 millones de euros sólo en cultivos pendientes de recolección. En este sentido, los cítricos han sido los más perjudicados, con pérdidas estimadas en 192 millones de euros, seguidos por los caquis con 54 millones, hortalizas con 24,8 millones y aguacates con 7,2 millones
Estas pérdidas se deben, en gran parte, a que muchos de estos cultivos se encontraban en plena campaña de recolección, especialmente las variedades tempranas de mandarinas y caquis. No obstante, además de los cultivos, las infraestructuras agrarias han sufrido un impacto muy importante. ASAJA calcula que los daños en este ámbito alcanzan los 486 millones de euros.
Dentro de este apartado, se estiman 260 millones en pérdidas por daños en caminos rurales, 120 millones en infraestructuras de riego, incluidos pozos y tuberías, y 54 millones en parcelas con riego localizado. Asimismo, han reportado importantes destrozos en invernaderos, construcciones rurales y muros de contención, sumando pérdidas adicionales significativas, como también los árboles que han sufrido asfixia radicular debido al exceso de agua, un gasto que costará cerca de 85,5 millones de euros.
Por otro lado, las parcelas arrastradas por la riada requieren trabajos de acondicionamiento y replantación, lo que representa otros 59,4 millones en pérdidas. Finalmente, los desperfectos en maquinaria agrícola alcanzan los 10 millones de euros, y las instalaciones ganaderas han reportado pérdidas superiores a los 20,5 millones, evidenciando la magnitud del impacto del temporal en el sector de la región.