El equipo jurídico del italiano Francesco Arcuri, expareja de Juana Rivas, está valorando presentar una denuncia por presuntas injurias contra la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, y la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego. Las declaraciones de ambas responsables políticas, cuestionando la idoneidad de Arcuri como padre, han generado indignación entre sus abogados. Díaz afirmó recientemente que «un maltratador nunca será un buen padre», mientras que Rego expresó su «alivio» cuando un juzgado español suspendió la orden de restitución del menor a su padre, aludiendo al «sufrimiento» del niño.
Los abogados de Arcuri consideran que estas afirmaciones podrían vulnerar los principios de presunción de inocencia y respeto a las decisiones judiciales. Según Enrique Zambrano, representante legal de Arcuri en España, estas declaraciones «carecen de fundamento», ya que, hasta el momento, la justicia italiana, encargada del caso, no ha adoptado ninguna medida cautelar que justifique la suspensión de la entrega del niño a su padre.
El centro de esta disputa está en la custodia del hijo menor de la pareja, quien debía regresar a Italia con su padre tras pasar las fiestas navideñas con su madre en España. Zambrano subraya que Italia es el país competente para decidir sobre este asunto, conforme a la normativa europea, y recalca que no existe ninguna situación de emergencia que impida la aplicación de la orden de restitución. «El regreso estaba fijado para el 8 de enero y no cumplirlo podría considerarse sustracción de menores», advirtió.
Por su parte, el equipo de Arcuri ha insistido en que la justicia italiana tiene «la última palabra» en este caso. Aunque en Italia se sigue una investigación contra Arcuri por presunto maltrato a sus dos hijos, los tribunales de ese país no han dictado ninguna resolución que imponga medidas de protección específicas o que altere la custodia del menor.
La polémica en torno a este caso se intensificó tras la decisión del juzgado español de suspender temporalmente la entrega del niño. Según Zambrano, dicha resolución no se basa en hechos nuevos ni en una situación urgente, por lo que confía en que el tribunal italiano reiterará su orden en breve. «No hay motivos legales para que el menor no regrese con su padre, quien tiene la custodia legal», afirmó el abogado.
Este caso ha generado un intenso debate en la esfera pública y política, enfrentando posiciones sobre el rol de las instituciones y las figuras públicas en asuntos judiciales. Mientras tanto, los abogados de Arcuri sostienen que las declaraciones públicas que cuestionan al progenitor sin una base judicial sólida podrían tener consecuencias legales.