El Gobierno ha admitido que «se ha procedido a la supresión» de algunas unidades del Grupo de Rescate Especial de Intervención en Montaña (GREIM) de la Guardia Civil en Cataluña y Navarra por cuestiones «operativas», ya que las alertas son derivadas desde el servicio de emergencias 112 de cada región a los servicios específicos de las comunidades autónomas, en detrimento del Instituto Armado.
«Las incidencias que surgen en este ámbito están siendo atendidas por servicios específicos de rescate o por equipos de bomberos pertenecientes a la propia administración autonómica, a los que se le asignan la responsabilidad de las mismas desde el 112», ha indicado el Gobierno en una respuesta parlamentaria.
«Es por esto que atendiendo a cuestiones técnicas y operativas, directamente relacionadas con la eficacia del servicio en el seno de la Guardia Civil, se ha procedido a la supresión de los GREIM de Roncal y Puigcerdá«, ha señalado, en referencia a estos dos municipios de Navarra y Gerona.
En su escrito con fecha de 4 de abril, el Ejecutivo habla de «reorganización» del GREIM y lo justifica en que ha «considerado oportuno actualizar la distribución territorial al objeto de adaptarla al incremento exponencial de la actividad de esta especialidad en el medio natural».
En los últimos meses diferentes asociaciones profesionales de la Guardia Civil han cuestionado los planes de los gobiernos autonómicos con policías propias por el choque de competencias, especialmente en el caso de los Mossos d’Esquadra en lo que se refiere al servicio marítimo, un asunto abordado en el Congreso.
Estas asociaciones, de hecho, han puesto el foco en que la mayoría de las intervenciones se derivan hacia los Mossos desde el servicio de emergencias 112, que depende de la Administración autonómica y en cuya sala no hay representantes por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, ya sea Guardia Civil o Policía Nacional.