El Gobierno balear del PP ha decidido suprimir la exigencia de un título de catalán como requisito para ejercer de sanitario en las Islas.
A partir de ahora y a diferencia de lo que ocurría con el anterior Ejecutivo de la socialista Francina Armengol, el dominio del catalán sólo será un mérito para obtener plaza en un centro sanitario.
El Ejecutivo que preside la popular Margalida Prohens ha aprobado este lunes la eliminación de ese requisito mediante un decreto de medidas urgentes con el que cumple una de las promesas electorales que hizo el PP cuando llegó al poder en la región y que pactó con VOX en el acuerdo de investidura.
Se suprime así la exigencia del catalán, pero se facilitará la asistencia a cursos de catalán y se fomentará su conocimiento voluntario, con el fin de «facilitar a los ciudadanos el derecho de utilizar cualquiera de las dos lenguas oficiales en sus relaciones con la Administración».
PP Y VOX acordaron 110 puntos programáticos
El pacto firmado por ambas formaciones incluyó 110 puntos programáticos para lograr el fin de las políticas socialistas y separatistas aplicadas por el Gobierno de la socialista Francina Armengol. Uno de los principales es la garantía a los padres de poder elegir libremente el centro escolar para sus hijos, así como la primera lengua de escolarización. «Nos comprometemos a extender este derecho en todas las etapas educativas antes de acabar la legislatura, sin excluir ninguna de las lenguas cooficiales», recogió el acuerdo.
El acuerdo también subrayó que el desconocimiento del catalán ya no será motivo de penalización para el acceso a la función pública en Baleares. E incluyó la modificación de las normas que supongan la imposición lingüística y la garantía del derecho a que cualquier ciudadano pueda dirigirse a la Administración Pública en cualquiera de las dos lenguas oficiales «y sea contestado en la lengua que desee».