El líder del PP europeo, Manfred Weber, ha llamado a acercarse al «centro izquierda» en el debate de ideas, al tiempo que ha advertido sobre el verdadero desafío que, según él, enfrenta su formación política: el auge de «los extremos» y el avance de «tendencias autoritarias» en Europa. Desde Valencia, donde se celebra el congreso del Partido Popular Europeo (PPE), Weber ha insistido en que las elecciones venideras no se ganarán enfrentando al centro, sino «combatiendo el crecimiento de los populismos radicales».
El político alemán, que será ratificado este martes como presidente del PPE, ha afirmado que su formación necesita posicionarse con firmeza ante lo que considera una amenaza estructural para la democracia en Europa. «Nuestro rival no es el centro izquierda», ha señalado, «con ellos debatimos programas y visiones para Europa; la preocupación real es la penetración de discursos autoritarios y extremistas».
En su intervención ante los medios, Weber ha sido interrogado por la posición ambigua del Partido Popular de Austria, que, aunque ha evitado gobernar junto a la derecha soberanista, ha llegado a ciertos entendimientos puntuales con ella. Su respuesta, sin nombrar casos concretos, ha sido tajante: el PPE mantiene líneas rojas «muy nítidas», y sólo está dispuesto a colaborar con partidos que respeten los pilares básicos de la Unión Europea: la defensa del Estado de derecho, el respaldo a Ucrania y el compromiso con la integración europea.