Han pasado nueve días desde las elecciones generales, unos comicios en los que la estrategia de la dirección nacional del PP, con ofrecimiento de pactos al PSOE, ataques a VOX —su único socio potencial— y los llamamientos al voto útil desde Génova 13 frustraron la suma y la alternativa a Pedro Sánchez.
Los altavoces mediáticos del PP llevan desde la noche electoral recurriendo al mantra de los «11 millones de votos». ABC, El Mundo, La Razón, la COPE… y hasta dirigentes del propio partido. «Si sumamos los votos del PP y de VOX estaríamos en 11 millones de votos, una cifra muy similar a la que permitió en el año 2011 a Mariano Rajoy obtener una mayoría absoluta», afirmó en La Hora de La 1 de TVE el vicesecretario de Organización del Partido Popular, Miguel Tellado, tras los comicios.
¿Realidad o mito?
PP y VOX son dos partidos distintos —con programas diferentes— que se pueden complementar y en la práctica demoscópica se complementan. Fueron claves los 12 escaños de VOX en 2018 para expulsar al PSOE de la Junta de Andalucía —algo que el PP por sí solo nunca conseguió— y hacer presidente a Juanma Moreno, y en los comicios municipales y autonómicos del pasado mes de mayo se complementaron logrando, por ejemplo, expulsar al PSOE de ayuntamientos como Toledo, Valladolid o Burgos, y de regiones como la Comunidad Valenciana, Baleares y Extremadura, entre otras.
VOX recoge voto de la abstención, de antiguos votantes de la izquierda que nunca votaron al PP (el 15% del voto a la formación en los comicios que propiciaron el cambio en Andalucía tras décadas de socialismo llegó de la izquierda, según el estudio de transferencia de votos de Sigma Dos) y de electores jóvenes que ejercen su derecho por primera vez (el 20,1% de los nuevos votantes eligen la papeleta del partido liderado por Santiago Abascal, según las variables del barómetro del CIS del pasado abril). El electorado ha cambiado y los bloques izquierda-derecha ya no son fijos como hace una década.
Según los datos del Ministerio del Interior —sin incluir todavía el voto CERA—, el PP logró 8,09 millones de votos el 23J y VOX 3,03 millones. Ambos suman 11,12 millones de votos. La izquierda (PSOE y Sumar) lograron 10,77 millones, pero se van hasta los 12,39 millones de votos si se añade también a sus más que posibles socios (ERC, Junts, PNV, Bildu y BNG) para conformar un frente popular con comunistas, separatistas y bildutarras. Es decir, este nuevo Frankenstein tiene 1,27 millones de votos más que PP y VOX juntos. Añadiendo los votos de la CUP, partido antisistema separatista que no ha obtenido representación parlamentaria, a Coalición Canaria, que pese a compartir Gobierno en el archipiélago con el PP ya se ha mostrado favorable a negociar con el PSOE, y a Adelante Andalucía (escisión de Podemos) serían 12,61 millones de votos. La participación en los comicios fue del 70,40% (más de 24,74 millones de electores).
En 2011, fecha de referencia para el PP, la participación fue del 68,94% (más de 24,66 millones de votantes) y el Partido Popular logró 10,86 millones de votos (yendo a los comicios junto al PAR en Aragón y UPN en Navarra). Prácticamente lo mismo que PSOE y Sumar el pasado 23J. En aquellas elecciones, el PSOE logró siete millones de votos, Izquierda Unida 1,68 y UPyD 1,14. Los partidos separatistas y nacionalistas (Convergencia, Amaiur, PNV, ERC, Equo, BNG, Coalición Canaria y Compromís) lograron 2,6 millones.