«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Los conservadores ganan en Austria con el programa de la derecha identitaria

El Partido Popular austriaco (ÖVP) logra el 31,4% de los votos y la derecha identitaria el 27,4%.


Austria ha dado un vuelco a la derecha en las elecciones legislativas que ha ganado el conservador Sebastian Kurz y que deja a la derecha identitaria a las puertas del Gobierno como socio clave para formar cualquier mayoría.
El conservador Partido Popular (ÖVP) ha ganado con el 31,4 % y 61 escaños por delante de la derecha identitaria (FPÖ) -27,4% y 53- y del partido socialdemócrata (SPÖ) -26,7% y 52- con el 97% de los votos escrutados.
Los grandes perdedores son los opositores Verdes ecologistas, que han perdido más de 8,5 puntos porcentuales para quedar en un 3,9 % de los votos, insuficiente para entrar en el próximo Parlamento. Este descalabro se produce casi un año después de que el exlíder de los Verdes Alexander Van der Bellen lograse la presidencia austríaca frente al ultranacionalista Norbert Hofer.
Hasta hace pocos meses, el Partido de la Libertad (FPÖ) de Heinz-Christian Strache, euroescéptico, lideraba la intención de voto en todos los sondeos con un discurso por la identidad nacional y la protección de las fronteras.
Pero en mayo pasado, el ministro de Exteriores, el conservador Sebastian Kurz, lo desplazó rápidamente al segundo lugar tras asumir las riendas del democristiano Partido Popular (ÖVP), declarar el fin de la alianza con los socialdemócratas del canciller federal, Christian Kern, y convocar elecciones legislativas anticipadas.
A sus 31 años, Kurz es ya el político más popular en Austria gracias a su defensa de medidas restrictivas contra la inmigración, es decir, asumiendo el programa de la derecha identitaria. Con un giro drástico hacia la derecha, ha reformado el ÖVP, presentándolo como un movimiento nuevo, distanciado del estilo de sus antecesores aunque con el pleno apoyo de las poderosas figuras de esta formación.
El jefe de la diplomacia austríaca no esconde la gran similitud de sus propuestas del FPÖ y se vanagloria de haber impulsado la prohibición del burka en Austria, así como el cierre de la «ruta de los Balcanes» para los refugiados.
«El éxito de Kurz es el de una estrategia basada en la creación de una versión descafeinada del FPÖ», resume para Anton Pelinka, decano de los analistas políticos en Austria. Tanto es así, que en uno de los debates televisados esta semana, Strache y Kurz compitieron por quién de los dos mantiene mejores relaciones con el controvertido primer ministro húngaro, el conservador Viktor Orbán, en una confrontación que por lo demás ha dejado claro que no tendrían problemas en gobernar juntos.
Todo parece indicar que la llamada «gran coalición» ha perdido mucho del apoyo de la población y los observadores políticos estiman poco probable su reedición.
Leer más…
Multiculturalismo: Cuando la UE no había decidido autodestruirse

TEMAS |
+ en
.
Fondo newsletter