El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, subrayó este jueves en Pamplona la importancia del periodismo en la lucha contra el terrorismo, coincidiendo con la reciente aprobación de una controvertida ley impulsada por el PSOE. Dicha ley permitirá la excarcelación anticipada de más de 40 presos de ETA, entre ellos condenados por asesinatos, como parte de un acuerdo con Bildu, que ha sido clave para asegurar el apoyo de este grupo a los socialistas. De allí, el ministro se ha despedido entre insultos como «¡Hijo de puta!» o ¡»Que te vote Txapote!» de un grupo de estudiantes.
Grande-Marlaska asistió a la inauguración de las III Jornadas Contra el Terror: las historias detrás de las historias, organizadas por la Universidad de Navarra en colaboración con la Fundación de Víctimas del Terrorismo y el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo. El evento tuvo lugar en la Facultad de Comunicación de la universidad y contó con la participación de destacadas personalidades, como Ana Ollo, vicepresidenta segunda y consejera de Memoria y Convivencia, y Alicia Echeverría, delegada del Gobierno, entre otros.
Durante su intervención, el ministro destacó la relevancia de las redes sociales y los medios de comunicación como herramientas de gran poder para difundir información, aunque también alertó de los peligros asociados a su mal uso. «Estos canales pueden ser armas de doble filo», advirtió, haciendo hincapié en la necesidad de recordar las atrocidades del pasado «para educar y no repetir los errores».
En un mensaje dirigido a los estudiantes de periodismo presentes, el ministro los alentó a ejercer su profesión con responsabilidad, recordando la importancia de los códigos deontológicos en el periodismo para evitar convertirse en «altavoces de los violentos». Subrayó que es esencial cubrir temas relacionados con el terrorismo sin caer en justificaciones de los actos criminales, insistiendo en la necesidad de resaltar siempre la inocencia de las víctimas.
Grande-Marlaska también señaló que «el terrorismo es el mayor enemigo de la libertad«, recordando que los grupos terroristas se aprovechan de los espacios de libertad para expandir su mensaje de odio y miedo. Por eso, destacó la labor de los medios en no propagar la propaganda terrorista, instando a los futuros periodistas a informar con rigor y a no sucumbir a narrativas que puedan ser utilizadas para legitimar la violencia.
Este encuentro reunió a varios representantes de instituciones clave, entre ellos Juan Benito, presidente de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Florencio Domínguez, director del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, y altos cargos de la Policía Nacional y la Guardia Civil en Navarra. Todos coincidieron en la importancia de mantener viva la memoria de las víctimas para evitar que la historia del terrorismo se repita.
El acuerdo entre el PSOE y Bildu, que ha causado polémica, permite una reducción de penas para ciertos presos de ETA, lo que ha generado preocupación entre algunos sectores. Sin embargo, Grande-Marlaska no abordó directamente esta cuestión en su discurso, enfocándose en la necesidad de un periodismo comprometido con la verdad y la defensa de los valores democráticos frente al terrorismo.