El ministro de Consumo, Alberto Garzón, el portavoz del grupo parlamentario de Unidas Podemos, Pablo Echenique, y uno de los cerebros de Podemos, Juan Carlos Monedero, han coincidido este miércoles en un seminario organizado por la fundación vinculada al partido morado, Instituto República y Democracia, y subvencionado, de manera «escueta», según Monedero, por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación.
En su intervención, Monedero, que moderaba el coloquio, recordó que en los últimos años «hemos tenido una pandemia» y «ahora tenemos una guerra»; elementos que, a su juicio, «insisten en la idea del calentamiento global», en cambios geopolíticos y «en realidades electorales que no siempre están ayudando a que los pueblos puedan salir de sus problemas estructurales». Pero, sobre todo, añadió, «tenemos un problema en la construcción de imaginarios».
Monedero dijo que «si no sabemos a dónde vamos es difícil caminar». «Decía el bueno de Mao Zedong que cuando no hay claridad ideológica tampoco hay claridad en la organización», afirmó, citando al sanguinario dictador comunista chino.
Monedero mencionó la necesidad de organizar nuestros países para enfrentar «desafíos enormes»: a saber, el calentamiento global, la robotización de la economía, las migraciones, los cambios geopolíticos que desembocan, «porque hay alguien que tiene interés en que así sea«, en guerras.
«Necesitamos saber hacia dónde caminamos, puesto que el modelo neoliberal, aquel que empezó en el 73 seguramente con el golpe de Estado contra Salvador Allende, está agotado», aseguró. Monedero confesó tener la certeza de que ese neoliberalismo «morirá matando».
Frente a la «utopía mercantilizadora consumista», continuó el idéologo de Podemos, «el mundo progresista qué ofrece». «Un mundo en que cuando gobernamos cuesta mucho gobernar y en cambio a la reacción le bastan a veces meses para desmantelar todo lo construido durante años», indicó no sabemos refiriéndose a qué. «Además, tienen un control de medios de comunicación, tienen oligopolios de diferentes ámbitos en el mundo, y dificultan la construcción de esa alternativa», señaló.
El siguiente en hablar fue Alberto Garzón, que dedicó el grueso de su intervención a hablar del cambio climático. El ministro de Consumo afirmó que «todos y todas» ―el lenguaje inclusivo qué no falte― «somos víctimas de las propias deficiencias de ese paradigma» que ha entendido lo económico «absolutamente desconectado del contexto biofísico en el que se inserta la economía«.
«Ahora mismo hay una desincronización con cómo funciona la economía entendida en un nicho pequeño con respecto a los límites del planeta», alertó. «Los límites del planeta han sido ampliamente superados ya por esta dinámica económica», afirmó el ministro comunista.
Según Garzón, no es la humanidad, como un abstracto, «la que vive fuera de los límites del planeta» sino que «es un sistema económico particular», que lo que hace «es tener una serie de presiones e impactos sobre el planeta que hacen que sea, sencillamente, insostenible».
«Los impactos ecológicos van más allá del cambio climático. Tienen que ver con la extracción prácticamente desaforada de los recursos materiales, no sólo de los energéticos, también los minerales», explicó el ministro.
«Las responsabilidades de estas presiones e impactos medioambientales son distintas según la clase social” y al mismo tiempo “hay países que tienen mayor responsabilidad en este tipo de presiones e impactos”. «Un ejemplo reciente de un estudio del año pasado señalaba que Estados Unidos es el responsable del 40% de las emisiones de CO2 acumuladas desde 1850″, señaló Garzón.
«Aunque a día de hoy, China sea una de las potencias principales en la emisión, si consideramos el tiempo completo nos damos cuenta de que regiones como Estados Unidos representan el 40% de esa responsabilidad y en el caso de la Unión Europa alcanzamos el 20%. Eso no señala ya una serie de responsabilidades asimétricas a la hora de abordar este reto», dijo exonerando a China, el país que más contamina del mundo; doblando, de hecho, a EEUU.
Pablo Echenique, que se definió como un científico temporalmente haciendo política, también ahondó en la cuestión climática. «No se dice muchas veces y creo que hay que decirlo: el carácter de origen antropogénico del cambio climático es posiblemente uno de los hechos científicos mejor establecidos en la humanidad», aseguró categóricamente.
«Vivimos una reacción anticientífica y negacionista proveniente de la ultraderecha en un montón de países del mundo», advirtió el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso. «Hay pocas cosas mejor establecidas a día de hoy que el hecho de que estamos caminando hacia la destrucción planetaria y en que eso tiene que ver con la actividad económica humana», reiteró, «no es opinión, es ciencia».
«Es evidente que el capitalismo es el motor de la destrucción climática en nuestras sociedades», afirmó Echenique. «De la misma manera que no se puede ser demócrata si uno no es antifascista, no se puede ser ecologista sin ser anticapitalista«, sentenció.
Echenique recordó lo afirmado por Garzón, que EEUU “es el emisor de más del 40% del CO2 que, a día de hoy, contiene nuestra atmósfera”. “No se le puede pedir a países que no han podido aprovecharse de esa energía de la que EEUU sí se ha aprovechado para llevar a cabo su desarrollo económico», una vez que EEUU «ha contaminado el planeta ‘ahora usted tiene que postergar su desarrollo económico porque gracias a Estados Unidos ahora estamos en los límites planetarios de gases de efecto invernadero’. Esto, sencillamente, no sería aceptable para las sociedades de esos países y, por lo tanto, no sería viable políticamente«, dijo Echenique sin mencionar a China.
