Todos aquellos usuarios que operen en aplicaciones de compraventa online, hayan rebasado los 2.000 euros en ventas y hayan realizado más de 30 operaciones en un año recibirán multas de Hacienda en los próximos días.
La decisión de la Agencia Tributaria de perseguir a estos grupos de personas surge a raíz de la DAC7, una directiva europea (Directiva 2021/514) que obliga a estas plataformas a compartir información sobre sus usuarios con las autoridades fiscales. Esta regulación, que ha sido incorporada en el Real Decreto aprobado por el Consejo de Ministros, establece que aquellos vendedores que cumplan los requisitos mencionados anteriormente deberán declarar esos ingresos a Hacienda.
Las sanciones por no cumplir con esta obligación fiscal dependerán de cada Estado miembro, pero la normativa europea es clara en que las penalizaciones deben ser «eficaces, proporcionadas y disuasorias». Esto se aplica específicamente a aquellos que utilizan servicios transaccionales para vender sus artículos. Si no se declaran estos ingresos, la Agencia Tributaria podría imponer multas correspondientes, y estos ingresos deberán incluirse en la declaración del IRPF.
No obstante, no todos los usuarios de estas plataformas se verán afectados. Vinted ha asegurado que la venta de artículos personales no está sujeta a impuestos y que la mayoría de sus miembros no tendrán que preocuparse por esta normativa. «Si no recibes noticias nuestras, no tienes que hacer nada. Puedes seguir vendiendo con total tranquilidad», indicó la plataforma en un comunicado. Wallapop, por su parte, señaló que sólo un 1% de sus usuarios podría superar los límites establecidos por la regulación y, por tanto, estarían obligados a declarar sus ingresos.
En resumen, aunque Hacienda comenzará a monitorear las transacciones realizadas en estas aplicaciones, solo aquellos que superen un cierto volumen de ventas e ingresos estarán obligados a pagar impuestos. Para la mayoría de los vendedores ocasionales, esta normativa no supondrá ningún cambio significativo.