La Audiencia Nacional celebrará el próximo 15 de abril la vista y estudiará la petición de los 12 miembros de los Comités de Defensa de la República (CDR) procesados. En principio serán juzgados por pertenencia a organización terrorista, pero los acusados piden no celebrar la vista de la aprobación de la Ley de Amnistía.
En una providencia la Sala de lo Penal señala para ese día la vista para la presentación de los artículos de previo pronunciamiento. La defensa de los procesados presentó un escrito de alegaciones en el que hacían referencia a la norma y su aprobación.
Sólo pueden ser objeto de artículos de previo pronunciamiento la declinatoria de jurisdicción, la cosa juzgada, la prescripción del delito, la amnistía o indulto. La representación de los CDR solicitó la suspensión por falta de competencia de la Audiencia Nacional por la tramitación de la Ley de Amnistía.
Fue el pasado mes de noviembre cuando la Sala de lo Penal avaló la decisión adoptada en octubre por el juez Manuel García Castellón. El magistrado investiga a los presuntos miembros de un núcleo radical de los CDR dispuestos a usar la violencia para conseguir la independencia.
La Fiscalía pidió sentar en el banquillo a Eduardo Garzón, Esther García, Sonia Pascual, Queralt Casoliva, Germinal Tomás, Alexis Codina, Jordi Ros y Rafael Delgado por pertenencia a organización terrorista. También por tenencia, depósito o fabricación de explosivos y estragos, este en grado de tentativa. Respecto a los demás procesados, el Ministerio Fiscal señaló a Ferrán Jolis, Xavier Buigas, David Budria y Clara Borrero sólo por pertenencia a organización terrorista.
Según la investigación judicial, este grupo formaba el denominado Equipo de Respuesta Táctica (ERT), una célula integrada por un núcleo radicalizado procedente de diferentes CDR. La creación del ERT se decidió para contar en el seno de los CDR con un grupo clandestino de individuos de máxima confianza.
De acuerdo con García Castellón, los miembros del ERT habrían tenido participación activa en algunas de las acciones más contundentes que han llevado a cabo los CDR. Un ejemplo de esos actos serían el corte de carreteras, levantar barreras de peajes o verter aceite en el tramo de la C-55.
Su plan era ocupar el Parlament de Cataluña, defenderlo una vez tomado y permanecer allí una semana. Entrarían por la puerta principal y se les facilitaría el acceso desde el interior. Después se comunicarían con el exterior mediante una red de telecomunicaciones indetectable que configurarían ellos mismos.
