La portavoz del Gobierno catalán, Patricia Plaja, ha afirmado que se decretará la fase de «excepcionalidad» en siete nuevas áreas de la región a raíz de la sequía, lo que supone restricciones en el uso del agua en 495 municipios catalanes.
En rueda de prensa este martes, tras la reunión del Consejo Ejecutivo, ha afirmado que en la actualidad hay 224 municipios en situación de excepcionalidad y que pasarán a ser 495, de manera que «supondrá un paso más en la reducción de agua en algunos usos».
Concretamente, se reducirá al 40% en los usos agrícolas, al 15% para usos industriales, y habrá menos agua para usos lúdicos y prohibición de riego en zonas verdes tanto públicas como privadas, también se prohíbe la limpieza de calles con agua potable y se reduce la dotación de agua a 230 litros por habitante y día –hasta ahora eran 250–.
El director de la Agencia Catalana del Agua (ACA), Samuel Reyes, ha explicado que la nueva fase de excepcionalidad afectará aproximadamente a unos seis millones de personas del total de los 495 municipios.
