Zaragoza vivió una alarmante ola de robos violentos que dejó como resultado una docena de personas detenidas y un herido hospitalizado el pasado fin de semana. Uno de los episodios más graves tuvo lugar el sábado por la tarde, alrededor de las 17.30 horas, en una terraza de la plaza Santo Domingo, situada en el conflictivo barrio de El Gancho. Tres jóvenes de origen marroquí atacaron a un hombre que estaba sentado con el objetivo de robarle su teléfono y el dinero que llevaba. Cuando la víctima intentó resistirse, fue brutalmente golpeada con puñetazos y una botella de cristal, lo que le provocó una herida sangrante en la cabeza.
La Policía Nacional, que se encontraba en la zona, respondió rápidamente y, tras realizar varias rondas de búsqueda, detuvo a los tres presuntos agresores. Los detenidos, dos de 18 años y uno de 23 años, cuentan con un total de diez antecedentes por robos violentos, según adelanta el portal digital OkDiario. Tras ser puestos a disposición judicial el domingo, se decretó su libertad con cargos.
Ese mismo sábado, pocas horas después del primer incidente, otro violento robo se produjo en el barrio de La Magdalena. A las 21:30 horas, en la calle Asalto, cuatro hombres de origen argelino atacaron a un señor que estaba sentado en un banco. Según relató la víctima, los agresores le golpearon con barras de metal en varias partes del cuerpo antes de robarle dinero en efectivo y un blíster de medicamentos anticonvulsivos (pregabalina). Los atacantes huyeron hacia el Parque Bruil.
A lo largo del fin de semana, la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional llevó a cabo múltiples intervenciones en distintos puntos de la ciudad para frenar esta oleada de robos, en su mayoría perpetrados con violencia o intimidación y dirigidos a sustraer teléfonos móviles. Estas operaciones culminaron con la detención de una docena de individuos involucrados en estos delitos.