La Sindicatura de Cuentas de Cataluña propone reducir la subvención electoral a percibir por las formaciones políticas en 54.724 euros, después de detectar gastos no considerados subvencionables por pagos fuera de cuenta electoral o de plazo, según el informe relativo a las elecciones al Parlamento del pasado mayo de 2024.
Hace referencia a algunos partidos; en cuanto al PSC, la cifra es de 660,74 euros por pago fuera de cuenta electoral; en el caso de los Comunes la cifra es de 2.319 y Alianza Catalana de 1.476 euros; y respecto a Junts, la cifra asciende a 10.036,4 en el primer caso y 40.230,89 por estar fuera de plazo.
No obstante, la Sindicatura no propone la no adjudicación de la subvención electoral prevista en la normativa electoral, y por ello en el informe enviado al Parlamento se presentan observaciones detalladas referentes a las contabilidades de cada formación que ha obtenido representación.
Las formaciones declararon recursos por 10.361.456 euros; según su naturaleza, 180.730 procedían de aportaciones privadas, 4.240.071 de aportaciones de los partidos, 1.835.763 de anticipos de las subvenciones electorales y 4.104.890,63 de operaciones de endeudamiento, de los que 2.365.590 correspondían a endeudamiento bancario y 1.739.30 en contratos de microcréditos.
Respecto a los gastos electorales, los partidos declararon 11.282.475 euros, de los cuales 7.280.928 correspondían a gastos ordinarios y 4.001.547 a gastos por envío directo y personal a los electores de sobres y papeletas electorales, o de propaganda y publicidad, también conocido como ‘mailing’.
El informe de la auditoría pública también pone de manifiesto que, pese a que todas las formaciones abrieron una cuenta bancaria específica para los comicios, se han detectado fondos no ingresados en las cuentas electorales que corresponden a pagos de gastos electorales desde la tesorería de cuatro formaciones por 144.934,93 euros, si bien figuran declaradas en las contabilidades electorales.
VOX critica el «despilfarro» de la izquierda y separatistas
«Es inaceptable que se utilicen recursos públicos para financiar prácticas que no cumplen con la normativa electoral. Pero de la izquierda y el separatismo no sorprende nada. Los catalanes no tienen por qué costear con sus impuestos los despilfarros y las malas prácticas de los partidos políticos. VOX es ejemplo de buena gestión, demostrando que es posible administrar recursos públicos de manera rigurosa, como ha confirmado el informe del Tribunal de Cuentas«, han declarado desde VOX Cataluña.