El exlíder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona Ernest Maragall ha anunciado este lunes que rompe el carnet de ERC tras la polémica por los carteles difamatorios contra él y el expresidente de la Generalidad Pasqual Maragall y la enfermedad del alzhéimer.
«Desde hoy dejo de pertenecer a la organización, pero sigo identificado con la perspectiva de una ERC en un proceso explícito de renovación», ha subrayado en una rueda de prensa en la sede de los republicanos.
Maragall ha reiterado que todo el ‘affair’ de los carteles le ha producido «vergüenza y horror» y ha vuelto a cargar contra el entonces director de comunicación, Tolo Moya. El exconsejero no ha querido valorar si la apertura de cuatro expedientes ha sido suficiente y ha concluido que, para él, el caso está «cerrado».
De esta forma, y en respuesta a la filtración de audios revelados por RAC1, se ha destapado una reunión interna de altos cargos de comunicación de ERC, donde se discutía la gestión de un posible escándalo en caso de hacerse público. En la grabación, se escucha al vicesecretario general de comunicación republicano, Oriol Duran; al entonces viceconsejero de estrategia y comunicación del Gobierno, Sergi Sabrià; al exjefe de comunicación del partido, Tolo Moya; y al gerente y vicesecretario de finanzas, Jordi Roig, hablando sobre el asunto y cómo encubrirlo.
La conversación filtrada deja claro que los líderes de comunicación de ERC estaban preparando una estrategia para manejar el escándalo si salía a la luz. Este audio ha generado controversia y cuestionamientos sobre la transparencia y la ética en la gestión de crisis dentro del partido.
Los implicados discutían distintas tácticas para minimizar el impacto del escándalo y evitar que dañara la reputación del partido. La divulgación de estos audios ha provocado una ola de críticas y ha puesto en el centro de la atención pública la forma en que ERC maneja sus asuntos internos.