Portugal y Extremadura han pedido que se revise el convenio de Albufeira, el documento que regula los caudales de los ríos que atraviesan la región hacia el país luso y que no se actualiza desde 1998. No obstante, el primer ministro portugués, Luis Montenegro, va más allá y pide que los agricultores españoles que utilizan recursos del embalse de Alqueva paguen por ello.
Durante su discurso en el 42º congreso de su Partido Social Demócrata (miembro del PPE), aseguró que el acuerdo «histórico» va a «garantizar caudales mínimos en el río Tajo, caudales ecológicos en el río Guadiana y el pago de agua de Alqueva cuando los agricultores españoles hagan uso de ello». En este sentido, afirma que junto a España van a «resolver diferencias pendientes».
Ante esta situación, las organizaciones agrarias han mostrado su rechazo a las declaraciones del primer ministro luso. El secretario técnico de La Unión Extremadura, Luis Cortés, bromea diciendo que «les damos el agua y encima les pagas». Asimismo, el presidente de Apag Extremadura Asaja, Juan Metidieri, ha lanzado un aviso al ministro de Agricultura español Luis Planas para que «nos garantice que ya se nos cobra bastante y no cobrar ningún canon más».