El conductor del vehículo implicado en el accidente de tráfico de Galisancho (Salamanca) en el que murieron cuatro jóvenes de Alba de Tormes el pasado domingo ha recibido esta tarde el alta hospitalaria, ha abandonado el hospital donde estaba ingresado y ha declarado ante la Guardia Civil.
Fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Salamanca han confirmado que el joven de 29 años ha abandonado el hospital tras recibir el alta y que en el mismo centro ha sido informado por agentes del instituto armado de que debía cumplimentar una serie de datos sobre el accidente.
De forma voluntaria y acompañado de sus familiares se ha personado en la Comandancia de la Guardia Civil de Salamanca donde ha prestado declaración.
Mientras tanto, el otro superviviente del accidente, un joven de 25 años, ha sido trasladado a planta procedente de la UCI donde se encontraba desde el día del siniestro.
El conductor dio positivo en los análisis de alcohol y consumo de drogas, en concreto de cocaína y anfetaminas, según avanzaron ayer fuentes de la investigación, que también confirmaron que había perdido todos los puntos del carné de conducir y lo recuperó el pasado abril.
Las pruebas a las que fue sometido arrojaron resultados positivos en consumo de cocaína y anfetaminas, además de 0,52 miligramos de alcohol en litro de aire espirado en la primera medición, que se quedó en 0,41 en la segunda.
Fuentes de la investigación explicaron también que el conductor, que será investigado por cuatro homicidios por imprudencia y por lesiones, tiene antecedentes penales por tráfico de estupefacientes.
El siniestro se produjo sobre las 7.30 horas del pasado domingo, cuando seis jóvenes que viajaban en un turismo de cinco plazas se dirigían a su pueblo, Alba de Tormes (Salamanca), pero el vehículo se salió de la vía a la altura de Galisancho, en la carretera DSA-130.