El hecho de que Sánchez ordenara el pasado viernes presentar la moción antes de debatir el asunto en los órganos del partido -para que Rajoy no pudiera convocar elecciones- y de consultar con todos los presidentes autonómicos ha incomodado a algunos, si bien hoy ninguno se opondrá.
Tres días después de que el PSOE presentara una moción de censura a Rajoy en el Congreso, el Comité Federal avalará hoy esa decisión previsiblemente por unanimidad, según han avanzado los dirigentes territoriales del partido, cuyo líder, Pedro Sánchez, se ha comprometido a no negociar «con nadie».
La moción de censura comienza hoy también el trámite parlamentario con su calificación por parte de la Mesa de la Cámara y la posterior reunión de la Junta de Portavoces, donde los grupos serán informados formalmente de la iniciativa, por si quieren presentar una alternativa, para lo cual tienen dos días de plazo.
Después, será la presidenta del Congreso, Ana Pastor, la que fije la fecha de debate de la moción, para lo cual hablará antes con el candidato socialista, Pedro Sánchez.
Por su parte, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha despejado su agenda para los próximos días y no acudirá hoy a la inauguración de un foro de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) que se celebrará en Madrid y al que había confirmado días atrás su asistencia, ni tampoco se reunirá el martes con el líder de Podemos, Pablo Iglesias, como estaba previsto.
El Ejecutivo informa cada viernes de la agenda oficial de Rajoy para la semana siguiente, pero debido a la situación provocada por la presentación de esa moción, en esta ocasión no se publicó y quedó en el aire su participación en algunos actos que ya estaban previstos.
Los socialistas reunirán por la tarde al Comité Federal, una vez que la Mesa del Congreso haya iniciado la tramitación, en un encuentro al que se prevé que asistan prácticamente todos los dirigentes territoriales.
«Nadie se va a oponer», aseguran a Efe fuentes del PSOE andaluz, para quienes, una vez que la moción ya está presentada, «no hay nada que decir» ni que «buscar matices».
El hecho de que Sánchez ordenara el pasado viernes presentar la moción antes de debatir el asunto en los órganos del partido -para que Rajoy no pudiera convocar elecciones- y de consultar con todos los presidentes autonómicos ha incomodado a algunos, si bien hoy ninguno se opondrá.
Como ya hicieron en diciembre de 2015, los «barones» que se enfrentaron a Sánchez en las primarias podrían pedirle hoy que, para sacar adelante la moción, no negocie ningún acuerdo que ponga en peligro la integridad territorial de España, algo que el líder del PSOE ya ha prometido que no hará.
Tanto el PSOE andaluz como el PSC fijarán su posición en las respectivas reuniones de sus ejecutivas, que se celebran esta misma mañana y que ya estaban previstas de antemano, aunque se han adelantado las horas para poder llegar por la tarde al Comité.
Para que la moción salga adelante es necesario el respaldo de al menos 176 diputados y, para eso, los socialistas deberán contar o con Ciudadanos, además de los ya anunciados de Unidos Podemos, Compromís y Nueva Canarias, o a los independentistas catalanes de ERC y PDeCAT, junto al PNV o CC.