Pedro Sánchez ha viajado este miércoles a Marruecos, «país vecino, amigo y socio estratégico de España en todos los ámbitos». Pocas horas después del batacazo electoral en Galicia y apenas una semanas después del asesinato de dos guardias civiles —Miguel Ángel González, David Pérez— en las costas españolas de Barbate, el presidente del Gobierno se ha traslado a Marruecos en una visita sin agenda oficial. Todo apunta, claro, a una reunión con el Rey de Marruecos, Mohamed VI.
Lo escandaloso de su visita, sin embargo, no ha sido la rapidez con la que ha ido a Marruecos pero la tardanza con la que fue a Barbate —de hecho, aún no ha ido—. Muchos españoles se preguntan qué vínculos tiene el líder del PSOE con el país vecino como para regalar al Ministerio del Interior marroquí toda clase de vehículos profesionales y material policial. Mientras nuestros agentes quedan desprotegidos contra el narcoterrorismo.
Tal y como se recoge en la web de la Plataforma de Contratación del Sector Público, el Gobierno de España ha regalado a Marruecos equipo por valor de siete millones de euros. A través de la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas (FIIAPP), cuyo patronato preside el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha regalado a Mohamed VI 200 visores de visión nocturna, 190 cámaras térmicas, 60 quads, 15 buggies, 10 ambulancias y 5 camiones frigoríficos.
La Fundación, que ante presidía Nadia Calviño, cuenta también con la participación de Félix Bolaños, en calidad de ministro de Presidencia. No en vano es el ministro Bolaños, plenipotenciario, la mano derecha de Sánchez en sus relaciones con Marruecos. Otros titulares de carteras y representantes de ministerios vinculados con la Cooperación Internacional también figuran en el Patronato de la Fundación Pública que destina millones de euros a Marruecos.
Con el fin de «fortalecer las capacidades de Marruecos para gestionar sus fronteras marítimas», Bruselas creó en 2015 un Fondo Fiduciario. Si bien el Gobierno de Mariano Rajoy fue uno de los primeros ejecutivos en confirmar su participación, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha sido el mayor entusiasta en seguir regando con un equipamiento millonario al país vecino. Entre todas las licitaciones, la más elevada asciende a 4.840.000 euros, divididos en cuatro lotes de «suministros» a Marruecos.
