El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recibe a primera hora de este jueves en el Palacio de la Moncloa al presidente electo de Venezuela, Edmundo González, según han informado fuentes opositoras, tan solo un día después de que el Congreso de los Diputados, a instancias del PP, haya reclamado al Ejecutivo que se le reconozca como el presidente y de que el Partido Socialista haya votado en contra.
González llegó el pasado domingo a Madrid a bordo de un avión de la Fuerza Aérea española a petición propia tras haber pasado unos días escondido en la residencia del embajador español en Caracas. Según ha informado el Gobierno, el candidato opositor tiene la intención de pedir asilo, el cual se le va a conceder. Mantiene un encuentro este jueves con Sánchez antes de un acto público que tiene el presidente a las 12.00 horas.
Desde China, donde se encontraba cuando se conoció la noticia, Sánchez defendió el miércoles que permitir la llegada de González a España fue «un gesto de humanidad y un compromiso civil» de la sociedad española y de su Gobierno con personas que están «sufriendo persecución y represión».
Asimismo, en el plano político, reivindicó la postura del Gobierno desde las elecciones del 28 de julio en Venezuela, exigiendo la publicación de todas las actas y no reconociendo la victoria de Nicolás Maduro, pero tampoco la de González Urrutia. El presidente insistió en trabajar por la unidad en la UE «para que esa unidad nos permita tener margen de mediación de aquí a finales de año, para que podamos encontrar una salida que vehicule la voluntad democrática expresada en las urnas por el pueblo venezolano».
Finalmente, la PNL fue validada con el apoyo del PP, VOX, PNV Coalición Canaria, Unión del Pueblo Navarro y el voto en contra del PSOE, Sumar y los socios habituales del Gobierno, entre los que no ha estado Junts, que se ausentó de la votación para asistir a los actos por la Diada. Además, el exministro José Luis Ábalos se abstuvo.
Por su parte, González no ha hecho aún declaraciones públicas desde que llegó a Madrid acompañado por su mujer y dejando atrás en Caracas a una de sus hijas y sus dos nietos, ya que la otra reside en España desde hace años.
El opositor, un veterano diplomático, publicó el lunes una carta en la que agradeció al Gobierno español la protección que le había brindado y explicó que había tomado la decisión pensando en su familia y en Venezuela. En esa carta no denunció el fraude electoral cometido por Nicolás Maduro ni reivindicó el triunfo de su formación, lo que ha sido entendido por muchos como una «capitulación».
«Sólo la política del diálogo puede hacernos reencontrarnos como compatriotas. Sólo la democracia y la realización de la voluntad popular puede ser el camino para nuestro futuro como país y en ello seguiré comprometido», trasladó en esa carta compartida en sus redes sociales.
Este martes, durante la concentración frente al Congreso con motivo del debate sobre la propuesta del PP, su hija Carolina leyó un mensaje en su nombre a los cientos de venezolanos que se habían dado cita. En él, González hizo un llamamiento a la comunidad internacional para «redoblar los esfuerzos por la restitución de la democracia y la libertad en Venezuela».
«La voluntad del pueblo expresada el 28 de julio debe ser respetada (…) María Corina y yo les aseguramos que esta lucha que iniciamos continuará hasta que alcancemos los objetivos que nos pusimos», sostuvo.