Los taxistas madrileños han anunciado este jueves que mantienen la huelga indefinida y han advertido de que en los próximos días iniciarán acciones de protesta «más contundentes» para reforzar su postura.
La cuarta jornada de huelga de los taxistas de Madrid, que siguen atrincherados en los alrededores de Ifema, donde se celebra Fitur, ha dejado de momento un saldo de catorce heridos leves y dos taxistas detenidos.
En Barcelona, donde los taxistas decidieron esta madrugada, por un estrecho margen, poner fin a la huelga, las quejas proceden ahora del colectivo de vehículos de alquiler con conductor (VTC), que ha pedido la dimisión del consejero de Territorio, Damià Calvet.
Diez manifestantes, tres policías y un periodista han resultado heridos de carácter leve en los altercados que se han producido en la zona de los recintos feriales de Ifema, en Madrid. Según fuentes de Samur Protección Civil, el periodista ha sufrido una caída y el resto presenta cortes y contusiones.
En las proximidades de Ifema, un cordón de agentes antidisturbios de la Policía Nacional impide el acceso a la M-40 para evitar que los taxistas corten de nuevo la vía.
Este mediodía, un taxista ha sido esposado y detenido tras atravesar el cordón policial. Además, otro manifestante ha sido detenido en Atocha, presuntamente por causar daños a un VTC.
Protestas más contundentes
Los taxistas madrileños han anunciado este jueves que mantienen la huelga indefinida tras cuatro jornadas de paros al considerar que sus reivindicaciones siguen «en el punto de partida» y han advertido de que en los próximos días iniciarán acciones de protesta «más contundentes» para reforzar su postura.
Así lo han manifestado esta tarde en una rueda de prensa las cinco asociaciones de taxistas convocantes de los paros, que han instado al Gobierno regional, encabezado por Ángel Garrido, a tomar la iniciativa para retomar las negociaciones con el sector y garantizar «una regulación efectiva» para los vehículos con alquiler de conductor (VTC).
El presidente de la Federación Profesional del Taxi de Madrid, Julio Sanz, ha asegurado que los taxistas tienen «la conciencia muy tranquila» y que la voluntad «unánime» del colectivo es «no parar» con la huelga hasta que no se haya obtenido un resultado «tangible».
Críticas de Garrido
El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha abogado por la «convivencia» entre el taxi y los VTC, y ha criticado a una parte del colectivo de taxistas, ya que, en su opinión, por apostar a «todo o nada», «es fácil que se queden con nada».
En Barcelona, el presidente de la patronal Unauto VTC en Cataluña, Josep Maria Goñi, ha exigido la dimisión del consejero de Territorio y ha pedido al presidente de la Generalitat, Quim Torra, que «paralice» la norma que obligaría a precontratar los servicios de los VTC con antelación.
«Exigimos la dimisión del señor Calvet porque le hacemos directamente responsable de intentar destruir el sector de VTC en Cataluña, destruir casi 4.000 empleos y dejar sin servicio a miles de ciudadanos de Barcelona y el área metropolitana», ha asegurado.
El presidente de Unauto, Eduardo Martín, ha advertido a Torra de las «responsabilidades personales, administrativas y penales», que supondría legislar en contra de la «legalidad vigente».
Martín ha enviado sendas cartas a Torra y a Damià Calvet, en las que advierte de la responsabilidad que tendrá que asumir el Gobierno catalán y ellos mismos si legislan sin tener en cuenta las recomendaciones de las autoridades de la competencia.
Fin de la huelga en Barcelona
El portavoz de Élite Taxi, Alberto Álvarez «Tito», ha precisado que el fin de la huelga acordado por el sector es solo una «tregua» para que la Generalitat pueda cumplir sus compromisos.
«Puede ser una tregua infinita si van cumpliendo sus compromisos», ha apuntado.
Las protestas de los taxistas barceloneses ha llegado incluso a Waterloo (Bélgica). Varios de ellos se han plantado frente a la casa del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont para exponerle sus reivindicaciones.
Puigdemont se ha comprometido a trasladar las preocupaciones de los taxistas al Gobierno catalán.
Desde el ámbito económico, el presidente de la patronal CEOE, Antonio Garamendi, ha instado al Ejecutivo a intervenir en el conflicto del taxi para abordar las soluciones a nivel nacional con una única mesa de negociación estable.
«Se ha roto la unidad de mercado porque posiblemente para arreglar esta historia tenía más sentido, a nivel nacional, ver a qué acuerdos se pueden llegar«, ha señalado Garamendi en declaraciones a Telecinco.
El presidente del PP, Pablo Casado, ha reclamado también una regulación a nivel nacional para el sector del taxi y las licencias VTC, en lugar de «pasar la pelota» a las comunidades autónomas.
El secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Pedro Saura, ha lamentado que el presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, haya estado cuatro meses sin ocuparse de la regulación de las licencias VTC, lo que, en su opinión, ha motivado el nuevo conflicto con el taxi.