En 2024, España ha registrado que una de cada cuatro personas se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión social, lo que equivale a más de 12 millones de ciudadanos. Según datos de Eurostat, el país se ha situado como el cuarto con mayor tasa de riesgo dentro de la Unión Europea, con un 25,8%, superando a Lituania, Letonia y Estonia, y con una diferencia de 4,8 puntos porcentuales respecto a la media de los Estados miembros.
En especifico, el 34,1% de los niños y adolescentes españoles vive en riesgo de pobreza y/o exclusión social en 2024. Esta cifra representa el tercer valor más alto de toda la serie histórica nacional y coloca a España a la cabeza de la Unión Europea en este indicador. Así ha revelado el informe Análisis de la Encuesta de Condiciones de Vida con Enfoque de Infancia 2025, basado en los datos publicados el 13 de febrero de 2025 por el Instituto Nacional de Estadística (INE) a partir de la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) correspondiente a 2024.
Ante esta situación, el Consejo de Ministros aprobó el 15 de abril la transferencia de 198,7 millones de euros a los gobiernos de las comunidades autónomas, con la excepción del País Vasco y Navarra, así como a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. El objetivo de esta partida es reforzar los servicios sociales y financiar programas de apoyo a las familias y de lucha contra la pobreza infantil. De ese total, 65 millones de euros se destinarán específicamente a proyectos de intervención social y a prestaciones dirigidas a familias en situación de vulnerabilidad.
