Yolanda Díaz quiere acortar la jornada laboral. Que el Ministerio de Trabajo quiera acabar con el trabajo debería sorprendernos, pero no tanto que la última propuesta de la izquierda pase por trabajar menos. Así, tras las repetidas declaraciones de distintos políticos de Sumar como la propia Díaz o Íñigo Errejón en favor de acortar las horas semanales de trabajo, el Ministerio por fin ha propuesto un mecanismo para controlar el horario de los trabajadores.
Según fuentes vinculadas al departamento de Trabajo, el mecanismo de Díaz pretende obligar a las empresas a monitorizar las horas de descanso de los trabajadores, así como sus horas extras o las demás directrices que puedan afectar a la plantilla. Un control que, según el borrador inicial, se llevará a cabo a través de un mecanismo remoto y online de la Inspección de Trabajo y de la Seguridad Social.
El objetivo principal, según ha desvelado Yolanda Díaz, no es el de monitorizar las empresas. Aunque alguno podría pensar que un Ministerio en manos del partido comunista quisiera controlar por controlar, el equipo de la vicepresidenta insiste en que el nuevo mecanismo pretende hacer respetar los derechos de los trabajadores. Pero muchos son los que objetan el método diseñado, que podría incumplir la seguridad jurídica establecida por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
Que la Seguridad Social y la Inspección de Trabajo tengan acceso, en todo momento, y de forma remota, a los datos de los empleados españoles ha hecho levantar suspicacias en el mundo empresarial. El engranaje planteado por Díaz pondría en bandeja de plata la privacidad de empleados y empleadores y supondría una nueva intromisión del poder político en la libertad de empresa. Y eso preocupa.
En una sentencia del 14 de mayo de 2019, El TJUE sentenció (asunto C-55/18) que todos los Veintisiete debían imponer a las empresas alguna forma de control para registrar la jornada laboral de los trabajadores de la Unión Europea. El sistema debe ser accesible, objetivo y fiable, y son muchos los que ahora temen que la novedad propuesta por Yolanda Díaz para regular la jornada laboral no respete la fiabilidad y la objetividad que requieren los trabajadores y que también demandan las empresas.
