Las autoridades han identificado a Ryan Wesley Routh como el principal sospechoso del segundo intento de asesinato contra el expresidente de Estados Unidos y candidato a las presidenciales del mes de noviembre Donald Trump.
El ataque ocurrió este domingo en el Trump International Golf Club, ubicado en Florida. De acuerdo con fuentes policiales, Routh estaba armado y logró acercarse a las inmediaciones del club mientras Trump jugaba al golf.
Antes de que pudiera llevar a cabo algún ataque fue detectado por agentes del Servicio Secreto, quienes frustraron el intento de atentado. El detenido portaba un AK-47, fusil de asalto famoso por su uso en conflictos armados alrededor del mundo. Era contrario a Israel y dijo que estaba dispuesto «a morir por Ucrania».
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ordenó a su equipo que «continúe asegurándose» de que el Servicio Secreto tenga «todos los recursos, la capacidad y las medidas de protección necesarias» para garantizar la seguridad «continua» de Trump.
«Me siento aliviado de que el expresidente esté ileso», ha manifestado, después de elogiar el trabajo del Servicio Secreto y el resto de las fuerzas del orden «por su vigilancia y sus esfuerzos para mantener a salvo al expresidente y quienes lo rodean», según reza un comunicado de la Casa Blanca.