«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
Si los demócratas cumplen su palabra de votar al candidato más popular

Trump todavía puede conseguir 520 de los 538 votos del Colegio Electoral

El próximo 17 de diciembre se reúne el Colegio Electoral de los Estados Unidos y, si cumplen su palabra, los demócratas tendrán que entregar los votos de sus delegados a la candidatura republicana, con lo que Donald Trump superaría los 500 sufragios, muy por encima de los 312 resultantes de las elecciones.

En el último siglo y medio, cuatro presidentes fueron elegidos por el Colegio Electoral aunque habían quedado detrás de otro candidato con más voto popular. Son Rutherford B. Hayes (1876), Benjamin Harrison (1888), George W. Bush (2000) y Donald Trump (2016), todos ellos republicanos; y sus rivales vencidos, demócratas. Como el Colegio Electoral perjudica a los demócratas, los últimos intentos para suprimirlo provienen de ese partido.

El último es el Pacto Interestatal de Voto Popular Nacional, un acuerdo por el que los estados adheridos se comprometen a entregar los votos de sus delegados en el Colegio Electoral al candidato presidencial que haya obtenido más papeletas a nivel nacional. A este acuerdo se han sumado ya 17 estados y el Distrito de Columbia. Sus impulsores pretenden incorporar a todos los demás.

Si cuando los electores se reunan en las capitales de sus estados, los ya comprometidos con el Pacto Interestatal de Voto Popular Nacional le hacen honor, Donald Trump y JD Vance serán elegidos presidente y vicepresidente por 520 votos de 538, una cifra no conocida desde hace cuarenta años. A Kamala Harris sólo le corresponderían un delegado de Nebraska, los 13 de Virginia y los 4 de New Hampshire. Es decir, 18 votos.

En 1984, Ronald Reagan consiguió 525 votos electorales, los de todos los estados menos los 10 correspondientes a Minesota, de donde era su rival, Walter Mondale, que éste conservó por menos de 5.000 papeletas, y los tres del Distrito de Columbia, donde, en cambio, el demócrata le aventajó por 75 puntos. Con 520 votos colegiales, Trump empataría con Richard Nixon, en su elección de 1972.

El bochorno será tanto mayor cuanto Tim Walz, candidato a vicepresidente de Harris, promulgó en mayo de 2023, en su condición de gobernador de Minesota, una ley que obliga a los 10 electores de su estado a acatar el Pacto de Voto Popular Nacional y pronunciarse por la candidatura con mayor apoyo popular.

Ahora toca comprobar si los demócratas, desde Hawái a Maine, cumplen su compromiso o bien si dicen que ellos no pueden contribuir a devolver a la Casa Blanca a quien han llamado repetidas veces «literalmente Hitler».

Fondo newsletter