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Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

A prisión el tunecino que fabricaba armas biológicas para un atentado

El Instituto Robert Koch (RKI) de virología de Berlín cataloga la fácilmente disponible planta de ricinus communis o ricino como «potencial arma biológica».


La Fiscalía alemana informó de que ha ordenado el ingreso en prisión del ciudadano tunecino detenido en Colonia bajo la «sospecha de haber fabricado intencionadamente armas biológicas». 
Unidades especiales de la policía detuvieron ayer en su vivienda a Sief Allah H., de 29 años, junto a su mujer, de nacionalidad alemana, después de recibir un aviso de que el hombre había encargado una gran cantidad de sustancias tóxicas peligrosas y ante el temor de que pudiera estar preparando un ataque químico.
El comunicado precisa que el acusado había comenzado a mediados de mayo de este año a adquirir el equipamiento y las sustancias necesarias para la obtención de ricina, entre otros mil semillas de ricino y un molinillo de café eléctrico que compró a través de internet.
A principios de junio realizó su objetivo y fabricó con éxito ricina, que pudo ser confiscada ayer por las fuerzas de seguridad al registrar la vivienda del sospechoso.
La Fiscalía señala que queda por esclarecer si el acusado tenía previsto utilizar la ricina para cometer un ataque yihadista en Alemania, por lo que de momento sólo existe una «sospecha inicial» de que pudiera estar preparando un atentado contra la seguridad nacional.
Precisa, además, que no existen indicios de su pertenencia a una organización terrorista ni de la planificación concreta con lugar y fecha de un atentado.
El Instituto Robert Koch (RKI) de virología de Berlín cataloga la fácilmente disponible planta de ricinus communis o ricino como «potencial arma biológica».
La Convención sobre Armas Químicas de 19 de abril de 1997 impone una limitación a su comercio y uso como sustancia pura que no afecta a su empleo en trabajos de investigación y con fines médicos y farmacéuticos, que requiere, no obstante, del correspondiente permiso.
Una intoxicación por ricina, catalogada además como arma de guerra, puede causar entre otros síntomas insuficiencia renal y hepática e incluso un fallo múltiple de órganos con resultado de muerte a las 36 a 48 horas.

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