Este martes ha tenido lugar una negociación sobre la cuestión educativa, en la que se han pactado una serie de medidas concretas
Para poder conformar Gobierno, el Partido Popular Austríaco (ÖVP) necesita pactar con el FPÖ, una formación de derecha alternativa que ha hecho de la lucha contra la inmigración masiva y de la preservación de la identidad austríaca una de sus principales banderas. Es por ello por lo que los populares y los derechistas están manteniendo una serie de encuentros encaminados a negociar líneas de actuación para la próxima legislatura.
De esta manera, este martes ha tenido lugar la negociación sobre la cuestión educativa, en la que se han pactado una serie de medidas concretas: la imposición de sanciones a los padres cuyos hijos no cumplan con las obligaciones escolares, la exigencia de un aceptable nivel de alemán y la remuneración de los profesores vinculada a su rendimiento (esto es, que los mejores profesores cobrarán más).
En cualquier caso, la más criticada de estas medidas es la del conocimiento básico del alemán como exigencia para acceder a la educación primaria. Una medida que, aunque impulsada por el FPÖ, ha defendido el líder de los conservadores y el previsiblemente próximo primer ministro de Austria, Sebastian Kurz. ‘En el segundo año de Kindergarten, antes de entrar en la escuela, el nivel de alemán de los niños será evaluado en una conversación. Quienes todavía no tengan un nivel aceptable tendrán que esperar’, ha aseverado Kurz, quien se ha mostrado convencido de que esto permitirá mantener el sistema educativo austríaco en un nivel elevado.
Por su parte, el líder del Partido Liberal, Heinz Christian Strache, también se ha mostrado proclive a esta medida. Así, durante la presentación del acuerdo ha señalado que la medida garantiza que los niños con peor alemán no deterioren el nivel de las clases.
El FPÖ, muy satisfecho
El líder del Partido de la Libertad (FPÖ), que cada vez goza de mayor peso en la política austríaca, ha manifestado su regocijo con el acuerdo, ya que, de acuerdo con él, conllevará una mejora del sistema educativo: ‘Debemos ir hacia delante, no hacia atrás. Sufrimos un terrible déficit de nivel. Uno de cada tres niños no tiene nivel suficiente de alemán como consecuencia de experimentos educativos anteriores y de la inmigración. Esta armonización lingüística es necesaria para que todos los niños puedan seguir la clase’.
En el acuerdo alcanzado por conservadores, derechistas y liberales se pone especial énfasis en la labor de los padres en el proceso educativo. De esta manera, para las tres corrientes ideológicas es fundamental que aquéllos acompañen a sus vástagos en el aprendizaje.
‘Exigiremos a los padres una efectividad, pues estamos convencidos de que una carrera educativa sólo puede ser exitosa si cuenta con un buen trabajo conjunto por parte de niños, educadores y padres. Los padres tienen una responsabilidad muy especial y por eso hemos determinado que habrá sanciones estatales para aquellos padres cuyos hijos no cumplan con las obligaciones escolares, sanciones como el recorte de las prestaciones sociales del Estado’.